Fernando Hernández ha anunciado hoy su retirada como jugador de balonmano. Lo ha hecho esta mañana en una rueda de prensa en el pabellón Huerta del Rey, donde comenzó a fraguar una larga carrera de 24 años como profesional y donde jugó su último partido en abril de 2018, día en el que cayó lesionado.

"Como sabéis, llevo un año y medio lesionado y el hombro no evoluciona como hubiera deseado. Siempre he sido claro y honesto y he dicho que seguiría jugando mientras pudiera hacerlo con garantías de estar siempre al máximo nivel. Desgraciadamente mi hombro ahora mismo no me lo permite. Tengo varias secuelas, falta de movilidad y falta de fuerza, que no me dejan estar al nivel de exigencia que se necesita para estar en un equipo profesional", ha comenzado hablando el que fuese internacional, campeón del mundo y medallista olímpico, entre otros éxitos. "Lo he intentado todo, tratamientos, infiltraciones, la operación... pero sigo con dolores y la movilidad es mala", ha reconocido. Fernando cayó lesionado en un encuentro de la pasada Liga Asobal con el Recoletas Atlético Valladolid. Fue en Huerta del Rey ante el Condes de Albarei Teucro. Lo que comenzó con una contusión con edema óseo en su hombro izquierdo fue empeorando y en noviembre pasó por el quirófano.

"Hace unas semanas pasé por el Tribunal Médico y estoy a la espera del informe, pero lo que está claro es que así no voy a poder estar en ningún equipo profesional", se ha sincerado el vallisoletano: "Es un momento muy duro porque el balonmano ha sido mi pasión y mi vida. Han sido 24 años de profesional y me hubiera gustado despedirme en la pista".

El que fuese extremo derecho se ha despedido con palabras de cariño a sus padres y hermana: "El apoyo que siempre he tenido de ellos, sobre todo en esta última etapa que ha sido muy jodida para todos"; a sus hijas, Ainhoa y Aitana, "que son lo más importante que me ha pasado en la vida y por desgracia les he robado mucho tiempo que no vamos a poder recuperar. Ojalá algún día puedan vivir algo parecido y se sientan orgullosas de su padre como yo lo estoy de ellas ahora"; a los médicos Pedro Rozas, Pablo Grande y el doctor Ramos: "Grandes doctores pero sobre todo grandes personas"; al Ayuntamiento y la FMD, por su apoyo; a la afición: "Gracias por todas esas muestras de cariño, gracias por preocuparos, por pararme en la calle y decirme que me esperabais ver pronto en la pista"; a la prensa y a sus amigos: "La esencia de todo lo que al final nos queda de todo este viaje sois vosotros, mis amigos, los que estáis aquí y los que no habéis podido venir".

Fernando quiere seguir vinculado al balonmano. De momento lo hará en la base del CD Victoria, como ya lo ha hecho este año; y asegura que tiene ofertas, con lo que pronto se le verá en los banquillos.