Aún con la mente en el Camp Nou y con los últimos coletazos del arbitraje ante el Barcelona, el Real Valladolid entra desde este fin de semana en un tramo de Liga en el que puede dar un paso de gigante en su lucha por la permanencia o complicarse definitivamente su situación en la máxima categoría.
Ya no hay medias tintas y no vale apelar a la mala suerte o a circunstancias externas que marcan sus partidos (llámese covid, lesión o VAR), el Pucela necesita sumar de tres en tres. Y más si juega como local, aunque ahora no haya afición en las gradas, y ante un conjunto que está inmerso en otra batalla, la europea. Este domingo, a partir de las 18.30 horas, recibe al Granada, noveno clasificado antes de empezar la jornada y que este jueves jugó en la UEFA Europa League ante el Manchester United. Llama la atención eso, precisamente, que el cuadro blanquivioleta se exija la victoria ante un equipo que en cuatro días estará jugando en Old Trafford, en el llamado teatro de los sueños, donde ‘sueña’ con poder ver alguna vez Ronaldo a su Real Valladolid.
Pero la realidad es que este domingo solo valen los tres puntos. Es la exigencia del equipo y de su afición. Porque, el Pucela jugará sabiendo qué han hecho los cuatro conjuntos que inician la jornada por detrás. Porque el descenso está ahí al lado. Porque, pese a la mejoría en juego y sensaciones, la realidad es que de los últimos 7 partidos, solo ha podido ganar uno... eso sí, empatando otros cuatro. Porque de las cinco victorias de esta temporada, una fue ante el rival de este domingo y en su feudo. Porque al Valladolid la ‘suerte’ le debe una.
Sergio González recuperará efectivos. Al menos no tendrá que volver a llenar la convocatoria con integrantes de un Promesas que este domingo tiene una cita vital, ante el Zamora, en los Anexos. Al Camp Nou fue con tan solo 15 jugadores del primer equipo, entre ellos Marcos André y Hervías que, recién recuperados, volvieron a jugar unos minutos. Solo Toni Villa se quedó sin jugar. Para este domingo vuelve Orellana, tras cumplir partido de sanción, Roberto y Luis Pérez.
El once sí genera dudas. ¿Mantendrá su esquema de juego habitual, con un 1-4-4-2; o apostará, por lo visto ante el Barça, por un 1-5-3-2? Al entrenador blanquivioleta le gusta más la primera opción, aunque las ausencias en el centro de la zaga pueden marcar la elección final.
Enfrente estará un Granada plagado de incógnitas. Le ha pasado algo parecido al Real Valladolid con el tema de las bajas, teniendo que jugar, incluso, un partido en la primera vuelta (ante la Real Sociedad) con más canteranos que jugadores del primer equipo. Y ahora anda inmerso en Europa, lo que le ha hecho perder un poco de punch en la competición domésticas, con tres derrotas en sus últimos cuatro partidos, aunque ante rivales como Athletic, Valencia y Villarreal. Lejos de Los Cármenes lleva sin ganar desde mediados de diciembre, cuando se impuso al Elche, aunque la realidad es que esta temporada solo ha sumado otro triunfo más a domicilio, en octubre en Getafe; y tres empates (en Cádiz, Villarreal y ante Levante).
Más allá de cifras y de ver que la historia ha sonreído a los vallisoletanos contra los nazaríes en Zorrilla, al Real Valladolid le apremia sumar de tres en tres. Y más porque luego tiene dos partidos ante rivales directos, Elche y Cádiz.