Alonso: "Es un reconocimiento al trabajo de toda una vida"

D.V.
-

El dramaturgo vallisoletano, premio Max de Honor, cree que todavía le falta escribir su mejor obra y encontrar los "tesoros del arte"

José Luis Alonso Santos. - Foto: Ical

José Luis Alonso de Santos (Valladolid, 1942) ha sido reconocido con el premio Max de Honor 2022 por su vasta trayectoria como intérprete, dramaturgo y director de escena, así como por ser la voz de una generación del teatro independiente y experimental español, además de por su labor como ensayista y divulgador de las artes escénicas.

Para Alonso, según reconoció a la Agencia Ical, este galardón es muy gratificante por tratarse de un reconocimiento de sus compañeros y de gente cercana al teatro a toda su trayectoria. "Es un premio mucho más halagador que cualquiera que se pueda recibir por una obra concreta, es un reconocimiento al trabajo y al triunfo de toda una vida", afirmó en declaraciones recogidas por Ical.

El dramaturgo vallisoletano, que suma este reconocimiento a una larga lista en la que figura el Premio Nacional de Teatro, el Tirso de Molina o el Premio Castilla y León de las Letras, asegura que a lo largo de su dilatada carrera siempre ha escrito, interpretado o dirigido con el mismo cariño y la misma fuerza. "Lo mejor creo es que he sido constante y he cumplido con la tarea de cada día. Dentro del teatro, que es una cosa pequeñita, he procurado que mi obra siempre fuera respetable y que llegara al público", aseveró.

A pesar de este reconocimiento, Alonso asegura que todavía le falta escribir su mejor obra y hacer "el gran espectáculo". Cuando por el camino uno va haciendo lo que puede, siempre te falta algo. Me falta realizar mis sueños, encontrar los tesoros del arte". No obstante, apunta que como buen labrador que todos los días cultiva sus tierras, "yo todos los días voy a mis escritos y a mis proyectos, cuadros que empiezas a pintar y que no sabes si algún día los terminarás. Siempre estoy intentanto retratar las realidades de la sociedad".

Al mismo tiempo, apela al humor al considerarlo algo necesario en la sociedad, pero reconoce que en estos tiempos "no dan muchas ganas de reír, ya que estamos en un momento en el que si se puede caer el cielo, se caerá". Alonso argumenta que aunque en los "momentos oscuros" es cuando más necesario es el humor y el arte, aunque "también es una realidad que es muy difícil cultivar flores en las ciudades bombardeadas". Además, también reclama que después de tanto "sufrimiento", primero con la pandemia y ahora con la guerra de Ucrania y la crisis económica, se hace necesaria una cierta normalidad, con teatros y cines abiertos, para que el arte se pueda desarrollar. "Dar conciertos en mitad del hambre es muy difícil", sentenció.

La verdad

Echando la vista atrás, Alonso reconoce que lo que más ha cambiado en el teatro desde que el se subió al escenario del Zorrila es que ahora la verdad y el relato están muy distanciados. "Se ha puesto de moda la ocultación de la verdad por medio del relato y hoy en día hay una diferencia abismal entre lo que son las cosas y cómo se cuentan. La política actual está basada en el simulacro. Hitler y Stalin no disimulaban tanto como Putin".

En este sentido, argumenta que este cambio en el lenguaje del relato ha sido posible por la evolución de la tecnología de la información, especialmente por herramientas como el teléfono móvil, la vez que recalca que los medios de comunicaciones "son tan rápidos, tan masivos y tan mágicos, que perturbado el orden. Es lógico que ahora se quite la filosofía de la aulas. Para este mundo tan inmediato y en el que todo son rebajas, ya no hace falta la filosofía".

El dramaturgo vallisoletano recibirá el galardón el próximo 6 de junio en el Teatre Principal de Maó durante la ceremonia de entrega de la XXV edición de los Premios Max-Menorca de las Artes Escénicas que organiza la Fundación SGAE. La ceremonia será retransmitida por La 2 de RTVE, a partir de las 20 horas, a través del Canal Internacional y de RTVE Play.