El Real Valladolid 'salvó', así entre comillas, un punto en su duelo directo ante el Elche en el José Zorrilla. Los blanquivioleta lograron empatar en la recta final un encuentro que fueron perdiendo por 0-2. Lo hicieron con dos acciones aisladas en una segunda parte de mucho dominio local pero escasas ocasiones. De hecho el partido fue de control blanquivioleta, de posesión sin profundidad. Atrás, los de Sergio fallaron en la primera parte, con dos acciones de Josan materializó en gol. Así que 'salvar', entre comillas, es la mejor definición para un partido que valía más que los tres puntos, por el rival y el momento de la temporada, el final de la primera vuelta; y que el cuadro pucelano quería dedicar a Vicente Cantatore.

El Pucela salió mejor, con el control del cuero, con llegadas y asustando con Weissman. El israelí, acompañado por Kike Pérez, Plano y Orellana en ataque, casi rompió la defensa rival en el 7, pero no acertó a rematar. Y, como bien señaló el técnico Sergio González, el Elche llega poco pero cuando llega... era el 8 cuando Lucas Boyé bajó un balón, se lo dejó a Mojica y éste encontró a Josan, que sin pensárselo armó la pierna izquierda desde fuera del área haciendo el primero de la tarde. Mazazo y jarro de agua fría para el cuadro pucelano a las primeras de cambio.

El partido, que ya había empezado volcado hacia el mismo lado, pasó a volcarse más, con el balón monopolizado por los blanquivioleta. Y esta vez con ocasiones. Weissman tuvo el empate tras una larga jugada que acabó con un buen centro de Luis Pérez y remate del 9 con la rodilla... al palo. Se le negaba el gol al israelí, que en el 18 no encontró el pase de Orellana por banda izquierda.

Josan celebra el primer gol ante la presencia de Weissman. - Foto: LaLiga

El cuadro local mandaba y generaba ante un Elche que esperaba con todos atrás y a la expectativa de alguna contra. Orellana estuvo cerca de provocar un penalti, que él sí pidio pero ni el colegiado ni el VAR estimaron. Y mientras, los ilicitanos seguían agazapados a la búsqueda de alguna opción de salir y sacar alguna jugada a balón parado. Así llegó un córner en el 30, que Pere Milla peinó, saliendo el balón rozando el poste.

Aun así, el Pucela merecía el empate. Y de nuevo lo rozó por medio de Nacho. El lateral rompió por velocidad a pase de Kike Pérez, pero el balón le cayó a la derecha y su chut ante Edgar se fue fuera por poco. Era el minuto 31. Había tiempo de sobra pero parecía que empezaban las prisas. Se notaba en las acciones, los saques de banda, los gritos...

Y el fútbol no es quien lo merece si no de quien acierta. Y Elche no necesitó ni media acción para hacer el 0-2. En una acción que el colegiado dio ley de la ventaja al Pucela, cuando no lo había, el cuero llega a Verdú que, desde su campo, vio el desmarque de Josan, rompiendo el fuera de juego; éste la bajó al suelo a la perfección para batir de tiro cruzado a Masip. Con otro jarro de agua fría se llegó al descanso.

La derrota y con ello la vuelta a los puestos de descenso parecían irremediables.

Para evitarlo, el cuadro de Sergio sabía que necesitaba un gol pronto. Aunque el que primero avisó fue el Elche, por medio de Lucas Boyé, buscando la escuadra y forzando un córner. Eso le hizo tomar aire a un cuadro, el visitante, que quería amarrar los puntos.

Al técnico no le gustó el arranque de los suyos y pronto metió a Toni y Míchel en el campo por Kike Pérez y San Emeterio. El Real Valladolid necesitaba algo. No tiene a su afición para empujar. Y eso se nota. Necesitaba una acción que le metiese en el partido. Y esa llegó en el minuto 61, cuando Plano rompió por velocidad, cedió a Weissman y éste la metió con el cuerpo tirándose con todo. Pero el fútbol moderno tiene una cosa que se llama VAR y que a cámara lenta convierte en mano lo que en directo no lo es. Así, el colegiado Jaime Latre, tras ser avisado por la sala de videoarbitraje, decidió después de tres minutos y varios visionados que el cuero, a pesar de las dudas en las repeticiones, había dado en la mano del israelí, de espaldas. Así que la alegría por el 1-2 se tornó en languidez y rabia contra el colegiado.

Aun así, el cuadro blanquivioleta lo siguió intentando, volcando el juego por el lado de Orellana, poco acertado, pero que en el 70 vio solo en el pico del área a Míchel que, tras recortar a su defensor, puso el cuero ajustado al palo de Badía. El Pucela volvía a creer. Y había tiempo.

Pero curiosamente en ese momento, el Real Valladolid dejó de ser él mismo, empezó a fallar en controles fáciles, en pases cortos, dando más vida a un Elche que solo quería el final. Y más tras el 1-2 y sus cambios. 

La mejor llegó con un lanzamiento de Alcaraz desde fuera del área, que no cogió portería por poco. Era el 86 y Sergio dio entrada a Sergio Benito y Zalazar, justo cuando Hervías ponía una perfecta asistencia de falta para que Joaquín la pusiese en la misma escuadra. Era el 2-2. Increíble media hora antes. 

Los blanquivioleta deberían haber ido a por más. Era el momento, pero solo Toni lo intentó. El resto pareció conformarse con el punto. Y así, el Pucela llega al intermedio de la Liga con 19 puntos y fuera del descenso. Al menos por ahora.

Ficha técnica:

Real Valladolid: Masip; Luis Pérez (Hervías, m.72), Joaquín, Alcaraz, Nacho; Fede San Emeterio (Míchel, m.56), Roque Mesa (Zalazar, m.89); Orellana, Kike Pérez (Toni Villa, m.56), Óscar Plano (Sergio Benito, m.89); Weissman.

Elche FC: Badía; Barragán, Verdú, Mójica, Josema (Diego González, m.74); Raúl Guti, Jony Álamo (Víctor Rodríguez, m.74), Pere Milla; Josan (Cifuentes, m.74), Rigoni y Lucas Boyé (John, m.86).

Goles: 0-1, m.9: Josan. 0-2, m.42: Josan. 1-2, m.71: Míchel. 2-2, m.89: Joaquín.

Árbitro: Santiago Jaime Latre (Comité aragonés). Mostró cartulina amarilla a Fede San Emeterio (m.39) y roja directa a Roque Mesa (m.90, cuando ya estaba en la grada), del Real Valladolid y a Josema (m.51), Cifuentes (m.85), Pere Milla (m.90+), del Elche.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimonovena jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio José Zorrilla. Antes del inicio del encuentro, se guardó un minuto de silencio en memoria del que fuera entrenador del Real Valladolid, Vicente Cantatore y el actual técnico, Sergio González, colocó un ramo de flores en el césped del José Zorrilla.