Sergio González recuerda el "mal sabor de boca" del descenso

D.V.
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El nuevo técnico del Cádiz, donde espera "aportar el granito de arena" para conseguir el "ansiado" objetivo, no olvida la última temporada en Valladolid, que le dejó una "espinita", al haber hecho "muchas cosas bien que no tuvieron repercusión"

Sergio González, en su presentación con el Cádiz. - Foto: @Cadiz_CF

El nuevo entrenador del Cádiz, Sergio González, sustituto del destituido Álvaro Cervera, afirmó este miércoles en su presentación que tiene "ilusión" y los "cinco sentidos" puestos en conformar un "gran equipo" para que la afición "disfrute y venga al campo".

El exentrenador del Real Valladolid, de 45 años, destacó en la sala de prensa del estadio Nuevo Mirandilla que la hinchada del Cádiz "empuja muchísimo" y les "ayudará" en el reto de salvar la categoría, y asumió la "responsabilidad" que "requieren el cargo y la institución".

Admitió, en declaraciones que recoge Efe, que si no se consigue el objetivo de la permanencia, será "tan culpable" como los "primeros", y se mostró seguro de que el Cádiz le puede venir "perfectamente" a él y a su cuerpo técnico por lo que ha visto desde su llegada para poder "aportar el granito de arena" necesario para conseguir el "ansiado" objetivo.

El nuevo técnico del conjunto amarillo debutará este sábado en los octavos de final de la Copa del Rey en el feudo del Sporting de Gijón, un partido al que le da su importancia debido a que "cuanto antes ganes y cojas una dinámica de ganar, mucho mejor", recalcó.

Para Sergio, el encuentro en el estadio El Molinón-Quini puede servir para "empezar a ver situaciones" y para lo que quiere "introducir" en su equipo.

El entrenador de Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que ha mantenido su residencia en Valladolid tras salir del Pucela al final de la pasada campaña, subrayó que "hay que intentar ganar" para que "esa inercia" les pueda "ayudar" para "encarar mejor" el partido de Liga de la próxima jornada, el próximo martes en casa ante el Espanyol, su equipo de toda la vida.

"Me crié, me formé, fui jugador de Primera División y luego entrenador" en el Espanyol, recordó sobre el rival que tendrán enfrente en su primer compromiso liguero al frente del banquillo cadista. "Es mi equipo, pero el martes quiero ganarle", aseveró el nuevo entrenador del Cádiz, que anticipó que en su concepto de juego intenta estar "cerca del futbolista", que su equipo sea "ordenado" y que tenga la capacidad de "generar" fútbol.

Como reto añadido a su llegada, precisó que está "darle la vuelta al calcetín" tras el descenso la pasada temporada de su anterior club, el Real Valladolid, lo que le dejó con un "mal sabor de boca" y con una "espinita", al haber hecho "muchas cosas bien que no tuvieron repercusión".