El vallisoletano Miguel González se expone, junto a su compañero Ajdin Penava, a una multa por romper las normas de confinamiento que impone el estado de alarma vigente al ser sorprendido entrenando en una azotea en Vitoria, donde reside al ser jugador del Baskonia.

El alero vallisoletano y el interior bosnio fueron sorprendidos, como informa El Correo, por una patrulla de la Ertzaintza mientras se ejercitaban en la azotea de un edificio del barrio vitoriano de Salburua. Los hechos se produjeron en la tarde del pasado 22 de marzo. "Una patrulla de la Ertzaintza acudió a un edificio situado entre Portal de Elorriaga y Boulevard de Salburua tras haber recibido una llamada vecinal que alertaba sobre la presencia de dos jóvenes haciendo carreras en la azotea. Se trataba de los dos integrantes más bisoños de la plantilla que dirige Dusko Ivanovic, que ahora se encuentra apartada de los entrenamientos colectivos. Miguel González y Ajdin Penava se encontraban realizando series de carreras en una zona común ante la sorpresa de los vecinos de las viviendas colindantes", recoge la publicación en Vitoria.

González y Penava se exponen a sendas multas que no bajarán de 600 euros. Por otro lado, también se trata de una infracción que puede ser sancionada por el régimen disciplinario del Baskonia.