El Ayuntamiento de Valladolid está inmerso en un plan de retirada de su parque automovilístico de los vehículos más antiguos y contaminantes. La gran mayoría tienen más de una década,  aunque en algunos casos la edad media supera ampliamente los diez años.  Un problema al que se trata de poner coto en  los últimos años. Así, se han presupuestado diversas partidas para la compra de nuevos vehículos para Auvasa, la Policía Municipal y los Bomberos. Esta renovación ha supuesto, por ejemplo, que a finales del año pasado se retiraran de la circulación unos 200 vehículos del Servicio de Limpieza y de la Policía Local. Pero, ¿qué se hace con ellos?

El proceso por el que se ha optado es el de la licitación en varios lotes para desguazar estos vehículos. Una subasta que desde la Concejalía de Planificación se califica de un «éxito» porque los 200 vehículos se vendieron a finales de año y generaron unos ingresos extras de 25.000 euros.

Uno de los lotes, en el que se incluían 21 motos y 23 turismos policiales se adjudicó por 2.720 euros, incluía una cláusula que obligaba al adjudicatario a «la destrucción total de los mismos mediante el aplastamiento en prensa». Además, se exigía que se un funcionario policial levantara acta de destrucción.

Los otros dos lotes, que incluían 21 motos y 125 turismos del servicio de la Policía Municipal, se vendieron por unos 12.600 euros. Además, salió a licitación un cuarto lote compuesto por ocho vehículos del servicio municipal de Limpieza, que se vendieron por 10.501 euros. Se trataba de cinco camiones recolectores y tres furgonetas que también se han vendido a un desguace.

renovación. El plan de renovación de vehículos ha propiciado que se hayan comprado casi un centenar de vehículos nuevos (coches y motocicletas) para la Policía para intentar rebajar una media de 15 años de antigüedad en la flota del área. 

Los mismo sucede con los vehículos del servicio de Limpieza. En concreto, en  2018 se  incorporaron a la nueva flota, dieciocho vehículos nuevos, ocho de ellos de gas natural comprimido. De hecho, a finales de ese año se aprobó el plan  para la incorporación de gas natural comprimido como combustible en vehículos del Servicio de Limpieza y de la empresa AUVASA, con la previsión de invertir 1,8 millones al año durante cinco años a partir de 2019 para autobuses y 1,34 en los cuatro siguientes para adquirir camiones de limpieza.