La planta de Iveco en Valladolid tendrá que recurrir a finales de este mes al Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que solicitó hace unas semanas para todo 2022. La empresa ya ha comunicado a los trabajadores que la sección de preparación de cabinas de camión para la planta de Madrid se tendrá que quedar en casa la última semana de junio por falta de semiconductores. Bien es cierto es que el impacto de esta medida es moderado, porque solo afecta a un diez por ciento de la plantilla. En la producción de furgonetas Daily no habrá ningún parón.

Además, hay que tener en cuenta que estas previsiones pueden estar sujetas a cambios, los mismos que impone el mercado de microchips. Si en los próximos días se garantizara el suministro, Iveco podría dar marcha atrás a la aplicación del ERTE que ya figura en su calendario.

El ERTE que está en vigor en Iveco contempla 50 días de parada hasta finales de año. Aunque en un principio la empresa lo solicitó por la previsión de falta de piezas para la Daily, en esta ocasión se tendrá que utilizar en la línea de preparación de camiones.

Aunque la crisis de los semiconductores sigue provocando contratiempos en la programación de las empresas de automoción, su impacto remite poco a poco. El futuro ya se ve con un moderado optimismo. Un buen ejemplo es Renault, que ya ha trasladado a los trabajadores que prevé que la crisis remita en el segundo semestre. Incluso ha tenido que empezar a trabajar algún sábado por el incremento de demanda del Captur, que se ha podido satisfacer por la disponibilidad de piezas.