Mira por donde nuestra región se ha hecho internacional por un quítame allá esa ley de supuesta 'concordia'. Nada menos que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha tomado cartas en el asunto y ha instado a España a adoptar medidas contra la ofensiva antimemoria democrática de PP y Vox en tres comunidades autónomas: Castilla y León, Aragón y Valencia. Tres relatores especiales de la ONU han respondido a la petición de amparo del Gobierno español por la derogación de leyes regionales para los represaliados de la guerra civil y de la dictadura franquista. O sea, que vienen a decir que de concordia nada de nada, que lo que existe en estas iniciativas es vulneración de derechos humanos y de los tratados internacionales que ampara la propia ONU. Uno de los autores del informe, el argentino Fabián Salvioli, ha asegurado que «Espala puede ser condenada en foros internacionales». La polémica, por tanto, supera ya las discusiones nacionales para alcanzar otra dimensión, para que muchos países, sobre todo de nuestro entorno, se pregunten qué está pasando aquí y por qué a varios gobiernos autonómicos les cuesta reconocer «por escrito», que el franquismo fue una dictadura muy ajena a la democracia. ¿Rectificarán PP y Vox? Mucho me temo que, a juzgar por las primeras declaraciones, no. Algunos portavoces populares han acusado a la ONU de mentir y Feijóo ha dicho que los relatores no se han leído los textos de las leyes. Todo esto a bote pronto. Sin embargo, conforme han pasado los días y con dos comicios a la vista (catalanes y europeos) parece que ya llueve menos. La última noticia es que la dirección nacional del PP ha dado orden de enfriar, o parar, la tramitación de las leyes de 'concordia'. Al menos, en Castilla y León no se ha iniciado el proceso parlamentario para alivio (suponemos) del PP y cabreo (esto seguro) de Vox, partido que ha arremetido contra los relatores de la ONU, a los que acusa, incluso, de cobrar cuando tendría que saber que esos informes los realizan gratis. Así que ya estamos en todo lo alto del escalafón planetario. Gallardo puede colgarse una medalla al prestigio. ¿Y Mañueco?