Prohibido cruzar por cualquier sitio

LUIS AMO
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Policía, conductores y peatones alertan de la proliferación de ciudadanos que incumplen las normas en vías como García Morato, Camino Viejo de Simancas o avenida de Gijón

Los escolares del Colegio Cristo Rey cruzan la carretera de Gijón por cualquier sitio, el punto más cercano a la salida del centro, con el peligro que esto conlleva para peatones y conductores.

Cruzar por el paso de peatones es la asignatura pendiente de muchos ciudadanos. Se trata simplemente de cumplir con la normativa de seguridad vial. Y es que, en los últimos tiempos, agentes policiales, conductores e incluso los propios peatones alertan de un crecimiento del número de personas que cruzan las calles, avenidas o plazas por sitios incorrectos que, se da la casualidad, en la mayoría de los casos son puntos muy peligrosos para el viandante porque la visibilidad para el conductor es casi nula. Así las cosas, El Día de Valladolid ha recorrido la capital para mostrar los puntos más conflictivos: conflictivos por cruzar mal y por peligrosos. Así, el Ayuntamiento, a través de la Policía Municipal, recuerda a los peatones que cruzar por un sitio no señalizado o no regulado puede ser sancionado y también explica que, por ahora, no existe la previsión para 2014 de impermeabilizar ninguna vía de la ciudad. Con todo, el código lo marca como una infracción leve pero con una sanción de 90 euros.


Uno de las zonas más peligrosas en la actualidad es la avenida de Gijón-Adanero, exactamente en el tramo con el Colegio Cristo Rey. Varias veces al día, en horario de entrada y salida del centro, aunque sobre todo en el tiempo del recreo, son decenas de jóvenes los que cruzan indebidamente la avenida en dirección hacia la gasolinera de enfrente. Una acción cotidiana, en definitiva, que ya se ha cobrado sustos en forma de carrera dado que los escolares no han calculado bien las distancias como consecuencia, además, de las altas velocidades que los vehículos alcanzan en esta vía.


Otra de las avenidas con tráfico denso y por donde muchos cruzan por cualquier lugar, pese a que existen varios pasos de peatones coincidiendo con los centros escolares, es el Camino Viejo de Simancas. El primer tramo, entre La Rubia y Valparaíso, donde están los colegios Alonso Berruguete, ElPinarillo o Las Cubanas, es el más conflictivo porque los coches alcanzan más velocidad de la marcada de 50 kilómetros por hora y ante los numerosos menos de edad que pasan de un a otro lado de vía, por ejemplo, para acceder a la parada de autobús urbano. Algo similar sucede en el paseo de San Isidro, desde la salida del túnel hasta el paseo de Juan Carlos I, donde son numerosos los peatones infractores que además de jugarse la vida cruzando indebidamente, provocan una complicada situación entre conductores.

Una señora cruza incorrectamente por medio de García Morato, entre la pasarela y Zorrilla.Una señora cruza incorrectamente por medio de García Morato, entre la pasarela y Zorrilla.


Ya en el casco urbano propiamente dicho los infractores abundan en García Morato. El tramo de calle entre la pasarela de Arco de Ladrillo y el paseo de Zorrilla, con una amplia mediana, es otra de las calles más problemáticas en este sentido dado que se da la circunstancia de que atraviesan las calzadas de dos carriles más la citada mediana muchas personas de avanzada edad o ciudadanos con maletas en dirección a la estación de autobuses, dos públicos con unas características muy particulares que precisamente no les permiten echar a correr en un momento dado para evitar un posible accidente.

Más fotos:

Una mujer cruza por la calle Ramón y Cajal mal y además atenta a su teléfono móvil
Una mujer cruza por la calle Ramón y Cajal mal y además atenta a su teléfono móvil
Calle Gamazo
Calle Gamazo


Por último, ya en el centro histórico, donde se cruza de cualquier manera, en cualquier punto y sin respetar ni la señalización ni la circulación rodada es en la vía asoportalada que transcurre entre las plazas de La Rinconada yFuente Dorada. Pese a existir varios pasos habilitados, lo cierto es que los agentes policiales advierten a diario sobre la peligrosidad que entraña atravesar sin más esa concurrida calle. Lo mismo sucede en la calle Gamazo o en San Ildefonso, en el lateral de la Academia de Caballería, entre el Puente de Isabel la Católica y el paseo de Zorrilla. Cabe reseñar, por último, los cruces indebidos por la calle Ramón y Cajal, tanto en el tramo del Hospital Clínico como por donde la Facultad de Medicina.