El Grupo Municipal de IU en Valladolid considera "urgente" reconducir la política de vivienda, tras los resultados del informe 'Datos sobre el efecto de la crisis en los órganos judiciales' (desde 2007 hasta el cuarto trimestre de 2013), en los que se ha superado el número de ejecuciones hipotecarias.
Por este motivo, y a la vista de tales estadísticas, el Grupo ha preguntado al alcalde, Francisco Javier León de la Riva, si entiende que la política en materia de vivienda es la correcta, especialmente en el caso de las previsiones frente a los desahucios, ha informado a Europa Press.
Aunque los datos se ofrecen a nivel provincial y "no se desagregan" al local, IU ha señalado que es "más que difícil" que la ciudad, con una participación "elevadísima" en el porcentaje de población de la provincia (el 60 por ciento) y en el del número de viviendas, "pudiera salvarse de la debacle general".
Según las mismas fuentes, Valladolid es la segunda provincia de España donde más crecieron las ejecuciones hipotecarias con un aumento del 25 por ciento, para llegar a 824, récord histórico en la provincia. Además, en el citado informe se da cuenta también del número de desahucios: en el año 2013 se llevaron a cabo en Valladolid 672, una media de casi dos diarios que llegaron a hacerse efectivos.
INICIATIVAS EN MATERIA DE VIVIENDA
IU ha presentado en el Ayuntamiento diversas iniciativas en materia de vivienda, y concretamente sobre posibles actuaciones municipales para contribuir a hacer frente al incremento en el número de desahucios que desde 2007 ha aumentado un 400 por ciento.
Así, el Grupo Municipal ha recordado que llevó al Pleno del 14 de enero último una propuesta de revisión del Plan Municipal de Suelo y Vivienda 2012-2015, para establecer en él un nuevo eje estratégico, al que se debería dar prioridad, centrado en el problema de la infravivienda y los desahucios.
"La propuesta fue rechazada por el PP, pero entendemos que los datos del informe CGPJ, que ponen de manifiesto el fracaso de sus propuestas en esta materia, tan escasas como complacientes con los intereses de la banca opuestos a los de las familias, deberían llevar a la reconsideración de aquella negativa", ha concluido.