Las reacciones políticas al Toro de la Vega no se hicieron esperar durnante la jornada de ayer. El director general de Turismo de la Junta de Castilla y León, Javier Ramírez, manifestó que en la Administración «no existe ningún argumento para realizar ningún cambio» en la declaración de fiesta de Interés Turístico Regional para el torneo del Toro de la Vega.

Ramírez explicó que el Toro de la Vega fue «reconocido de interés turístico en base a una serie de condiciones y requisitos que debía cumplir y sobre los cuales no ha habido ninguna modificación». Según Ramírez, «sin entrar en otro tipo de valoraciones», desde el punto de vista turístico, «que es lo que nos compete, la valoración es muy alta».

Por otra parte, la Comisión Europea rechazó ayer pronunciarse sobre el Torneo del Toro de la Vega, por considerar que se trata de una «tradición cultural» que es competencia exclusiva de los Estados miembros y no de la UE.

«Las corridas de toros son una competencia de los estados miembros. La Comisión ha sido interrogada muchas veces en el pasado sobre lo que pensamos sobre las corridas de toros, pero corresponde a los Estados miembros decidir», dijo un portavoz del Ejecutivo comunitario, Frédéric, en rueda de prensa al ser preguntado por el Toro de la Vega.

Izquierda Unida de Castila y León manifestó su condena enérgica contra el espectáculo, «cruel y sangriento», que significa el Toro de la Vega. «Estamos en desacuerdo con esta exhibición de muerte y sufrimiento animal, como espectáculo típico de las fiestas de una localidad. Este tipo de espectáculos y similares no debieran permitirse en nuestra Comunidad».

Por último, el portavoz de ICV en el Congreso de los Diputados, Joan Coscubiela, ha registrado una proposición no de ley que insta al Gobierno a «establecer los mecanismos y desarrollos legales necesarios que eviten situaciones de maltrato animal como el Torneo del Toro de la Vega».