El patrimonio artístico y cultural, junto a la gastronomía y el vino, se han convertido en una de las grandes bazas para que Valladolid se posicione como uno de destinos de referencia en turismo de interior. La capital ya batió su récord de visitantes, con un incremento del 9,60% en 2017, con respecto a 2016, hasta llegar a los 415.711, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los últimos datos, presentados por el Ayuntamiento esta misma semana, apuntan a que la capital es el destino turístico que más creció en España en el primer semestre de 2018. El número de viajeros que recibió creció un 3,3% frente al 1,18% a nivel nacional.  

 Sus competidores más directos son las ciudades monumentales de su entorno como Salamanca, Segovia, Ávila, Burgos y León. Tres de ellas (Ávila, Segovia y Salamanca) son ciudades Patrimonio de la Humanidad. De hecho, Castilla y León es la región del mundo con más Bienes Culturales Patrimonio de la Humanidad. Estas declaraciones suponen un aval para hacerse con parte del pastel que supone que el 40% del turismo que se realiza alrededor de todo el mundo está enfocado ya al turismo cultural, según los últimos datos de la Unesco. Por su parte, la capital compite con sus más de 40 Bienes de Interés Cultural (BIC), incluido su casco histórico, que se pueden visitar durante todo el año. 

Algunos ofrecen el acceso libre, como mucha iglesias, algunos museos como el Patio Herreriano o enclaves como la plaza del Coso. Otros cobran entrada, como la propia Catedral o el Museo Nacional de Escultural, pero sus precios son, de media, más bajos que los de las ciudades de su entorno e incluso la mitad que en Segovia, Ávila o Salamanca.

Oferta.

Esta oferta se puede comprobar en las páginas web municipales, que son el principal escaparate de su oferta turística. En la del Ayuntamiento de Valladolid se propone una ruta de los 10 imprescindibles, que incluye desde la Plaza Mayor, la Catedral, el Museo de Escultura o el Patio Herreriano hasta la iglesia de la Antigua, la plaza del Coso o Caballería. 

La mayoría de estos monumentos son de acceso gratuito salvo la Catedral y el Museo de Escultura. De hecho, la Seo vallisoletana es de las más baratas del país. El acceso a la Burgos supone 7. En León se cobra 6 euros, mientras que en Ávila, Palencia y las de Salamanca (vieja y nueva) cuesta 5 euros. En Zamora son cuatro euros, en Segovia baja a tres y la más barata es Soria donde se cobran dos euros. Una situación que se mantiene si se compara con otras catedrales del país, donde la más cara es Toledo, con una entrada que asciende a 11 euros, seguida de  Sevilla con 9 euros y Victoria donde se cobra 8,5 euros por la visita.

La mayoría de los monumentos religiosos de la capital tienen el acceso libre, como ocurre con la iglesia de San Pablo o la Antigua. En Ávila, conoce la basílica de San Vicente supone dos euros y el panteón de San Isidro, en León, tiene una entrada de 4 euros.

Además, para hacer más asequible la visita a los monumentos de la capital, el Ayuntamiento oferta la tarjeta turística Valladolid Card, que por ocho euros facilita el acceso libre al Bus Turístico desde cualquiera de sus ocho paradas repartidas en las principales zonas de interés turístico y el Museo Nacional de Escultura, Museo de la Ciencia, Museo de Valladolid (Palacio de Fabio Nelli), Museo Oriental, Museo Diocesano y Catedralicio, Casa museo Colón, Museo Casa de Cervantes y al Museo de San Joaquín y Santa Ana. El año pasado la usaron más de 15.000 visitantes, mientras que al autobús turísticos se subieron casi 14.000 viajeros.

La comparativa del precio de los museos vallisoletanos con los de su entorno muestra unos precios similares. En la capital el acceso al de Escultura cuesta tres euros y al Oriental, cuatro. Un poco más alto es el precio para conocer el Museo de la Evolución Humana, que cobra seis euros, mientras que el Museo de Art Nouveau y Art Déco (Casa de Lis) de Salamanca cobra cuatro euros. El Musac de León y el Etnográfico de Castilla y León, en Zamora, cobran tres euros, mientras que el acceso a la Casa de la Moneda de Segovia sube hasta los cuatro. Otros museos como el Numantino o el de Palencia tienen precios simbólicos de un euro, mientras que el de Baltasar Lobo en Zamora es gratuito.

perfiles. Entre las ventajas del turismo cultural está que, como destaca el informe el equipo del Centro de Investigación, Divulgación e Innovación en Turismo (IDITUR) de Ostelea, presenta una posibilidad de gasto por encima de la media y un nivel educativo S?????

Superior. El perfil del turista cultural se define por un nivel de estudios superior, por una profesión liberal o cargo de responsabilidad, con ingresos medios por encima del promedio europeo, edad entre 20 y 30 años y usuarios de internet para buscar información.

Según un estudio municipal, la desestacionalización del turismo es un hecho en Valladolid y cuando en España, y también en Castilla y León, el mayor pico de llegada de turistas se produce en los meses de verano en la capital vallisoletana es algo más homogéneo, debido a una oferta en la que se mezclan varias facetas, pero especialmente lo cultural, lo deportivo y la celebraciones de congresos de todo tipo. En este sentido, Valladolid aspira a situarse como referente este turismo y, también, de las City Breaks (turismo de escapada urbana). Algo que busca  fomentar a través de la conferencia internacional sobre esta modalidad que se celebrará en el Museo de la Ciencia del 15 y 16 de octubre, y que contará con asistentes de más de quince países.

El Ayuntamiento quiere potenciar y aprovechar para el futuro de la mano de iniciativas que permitan «generar proximidad con las regiones de España ricas en turismo», como en el caso de Valladolid, que cuenta con «muchas fortalezas para ser un perfecto destino del turismo City Breaks», como explica la concejal de Cultura, Ana Redondo. Entre ellas destaca «el rico patrimonio histórico y cultural, la gastronomía o el deporte». Esto hace que la edil señale que Valladolid «está a la vanguardia de la gastronomía, con un producto como es el pincho y la tapa, y la enología, con cinco denominaciones de origen y tres rutas».

Un estudio encargado por el Ayuntamiento, a través de la Sociedad de Turismo, sobre el impacto del turismo en la economía y el empleo de la ciudad de Valladolid en 2017, apunta a que el impacto del turismo en la economía total de la ciudad en este periodo ascendió a 277,73 millones de euros, un 17,68% más que en 2016, periodo en el que llegó a los 236,01 millones.  De acuerdo con este estudio, el empleo total generado por la actividad turística en 2017, fue de 4.639 empleos totales, un 16,53 % más que en 2016 en el que se generaron 3.981 empleos.