La Junta estima un descenso del crecimiento económico del 1,5% y un aumento de la tasa del paro hasta el 18,6% en 2012, según el cuadro macroeconómico que presentó la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, en el que se asentará el presupuesto de este ejercicio a punto de aprobar.

En la caída del 1,5% se ha tenido en cuenta el descenso (-3,2%) de la demanda interna y de todos los sectores productivos, algo menos la industria pero con una estimación pesimista en la evolución de la agricultura y ganadería por la sequía.

Sin embargo, el descenso es inferior en dos décimas al -1,7% marcado por el Gobierno en el retroceso del Producto Interior Bruto (PIB) estatal para este año, que, aunque se ha tenido en cuenta por la Junta, se ha asentado en un mejor comportamiento de la economía autonómica -fue la que más creció en 2011- y con cinco puntos menos del paro.

Del Olmo explicó que presentan una estimación ajustada conforme a los datos de los que disponen, pese a que Funcas o Hispalink hayan situado en el -1% la evolución de la economía de Castilla y León. No obstante, uno de los aspectos recogidos en el cuadro macroeconómico es el incremento en casi dos puntos de la tasa del paro, ya que la Junta prevé un 18,6% este año sobre el 16,7% de 2011. Así, en empleo (equivalente a tiempo completo) el aumento se situará en un 3% frente al -1,3% del año anterior.

En el mismo cuadro, se presenta un descenso del 1,2 en el gasto de consumo final de los hogares y del 8 en el de las administraciones públicas por las medidas de ajuste. La caída del consumo se suaviza con el incremento del 1,7 en el saldo exterior, aunque la consejera reconoció que se puede contraer por la situación de otros países que puede frenar las exportaciones.

Techo de gasto. La Junta también marcó ayer un techo de gasto de 9.108,3 millones para 2012, un 6,2% inferior a 2011, lo que representa una reducción de 598 millones sobre los 9.706 del ejercicio anterior. Por primera vez, el Gobierno regional presenta un cuadro sobre el ciclo económico y se adelanta a la ley de Estabilidad, que se tramita en las Cortes y a la estatal, para cumplir el objetivo de déficit fijado por la UE.

Este techo de gasto coincidirá casi en su totalidad con el presupuesto autonómico de 2012, según explicó la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, si bien recordó que no se incluyen ahí las partidas de gasto financiero (amortización de la deuda e intereses). Sin dar una fecha para la presentación de las cuentas, manifestó que se rematan con la inclusión de las medidas de ahorro en educación y sanidad acordadas por el Gobierno, que, conforme a la estimación de la Junta, supone entre 600 y 700 millones de los 10.000 estatales.

La Junta prevé una desaceleración del 1,5% del PIB en Castilla y León sobre el 1,7 fijado por el Gobierno para España, una caída del empleo (equivalente a tiempo completo) del 3% y una tasa de paro del 18,6% sobre el 16,7 de 2011. En este escenario, la demanda interna cae un 3,2%, que se suaviza con el 1,7 de incremento del saldo exterior.

La suma de recursos no financieros, que marca el techo de gasto, proceden del sistema de financiación autonómica y los tributos propios de la Comunidad, que son 6.271,9 millones, un 4,12% menos que en 2011; de las transferencias finalistas, que ascienden a 798 millones, un -11,34%, pese a la inclusión de los 70 millones de la deuda farmacéutica; de los fondos de la UE, entre ellos la PAC, con 1.109,6 millones, un -4,45%, y otros ingresos de 133,3 millones, un -49,98%.

En total son 8.312,8 millones frente a los 8.869 de 2011 (-6,27%), a los que se añaden los 856,3 millones del 1,5% de déficit que permite el Gobierno a las autonomías este año, si bien se descuentan 60,8 millones de la contabilidad nacional. La consejera explicó que a partir de ahora aparecerá ese término que se refiere a ajustes con los que debe contra la Junta y puso como ejemplos tributos que no se ingresen o déficit de otras instituciones del sector público.

Otro dato que facilitó es el pago de los intereses de la deuda, que supone un incremento del 43,2% al pasar de 233,8 millones de 2011 a 334 de este año.

Al marcar el techo de gasto, la Junta se adelanta a lo marcado en la ley de Estabilidad y Disciplina Presupuestaria, que aprobó el pasado 29 de diciembre y se tramita en las Cortes, y a la estatal de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.

Presupuestos. Del Olmo precisó que, en el práctica, supone adaptarse al ciclo económico de manera que en periodos de recesión, como el actual, no se pueda incurrir en un endeudamiento ilimitado mientras que el superávit que se genere en una etapa de bonanza vaya a un Fondo de Reserva para amortizar la deuda.

La consejera manifestó que el techo de gasto se traslada automáticamente al presupuesto en los capítulos del uno al siete -personal, bienes y servicios, transferencias, inversiones y subvenciones- y reiteró que las próximas cuentas autonómicas primarán la educación, sanidad y servicios sociales, aunque añadió que se deberá esperar a su presentación para conocer cómo quedan esas materias así como las inversiones reales.

Recalcó que Castilla y León es una comunidad solvente y que tiene capacidad para devolver los intereses de su deuda, de la que recordó que está por debajo de la media estatal.