Aventura, respeto y compañerismo

ICAL / Valladolid
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Los 204 expedicionarios de la Ruta BBVA hacen escala en Castilla y León tras recorrer el sur de Perú y distintos rincones de España

Jóvenes de Castilla y León que participan en la Ruta BBVA - Foto: MIRIAM CHACÓN (ICAL)

Los nueve participantes castellanos y leones en la 29 edición de la Ruta BBVA , que estos días recala en la Comunidad, coincidieron hoy a la hora de destacar la "experiencia única" que ha supuesto la expedición que este año ha viajado por el sur de Perú y España, además de alabar el respeto y el compañerismo. Todos ellos, junto a dos monitores de la región, se sienten unos "privilegiados" por haber podido disfrutar de esta expedición que combina la educación en valores, el intercambio cultural y la aventura, en la que participan 204 chicos y chicas.
 
Aunque, este año, por las impresiones de los jóvenes de entre 15 y 17 años recogidas por Ical, hubieran preferido más aventura y deporte y menos conferencias y visitas culturales. Pero, tal y como recuerdan los organizadores de la Ruta BBVA, no es un campamento al uso sino que se trata de una beca académica y una universidad itinerante, en palabras de su director Miguel de la Cuadra Salcedo. De ahí que haya mucho más que diversión.
 
En todo caso, los nueve jóvenes procedentes de las provincias de Valladolid, Salamanca, Zamora, León, Palencia y Segovia aseguraron que el viaje iniciado en Perú el 18 de junio ha sido "inolvidable" al permitirles conocer un país desconocido, con una cultura diferente. Pero, todos ellos coincidieron en el compañerismo y con los amigos que han hecho durante la expedición, a los que esperan mantener durante mucho tiempo.
 
Ha supuesto una oportunidad para intercambiar experiencias con chavales de 21 nacionalidades diferentes. Más de la mitad, españoles, y que desde ahora entran a formar parte de los cerca de 9.000 jóvenes de todo el mundo que han pasado en estas ediciones.
 
Llega el final de su 'particular' aventura, con ciertas ganas de regresar a casa con sus familias para disfrutar de algunas comodidades de las que han estado privados, pero con mucha pena por abandonar su 'otra familia'. Una gran familia con la que han compartido experiencias e intercambiado vivencias de las que aún no son muy conscientes de haber asimilado. Tiempo tendrán para ordenar todo lo que han disfrutado durante más de un mes.
 
Además, cuentan con otro compañero de viaje inseparable, que les ha acompañado estos días: su diario, donde estaban obligados a apuntar cada jornada de la expedición. Un cuaderno donde está grabada una frase de Joseph Conrad y que resume muy bien el sentido de la Ruta BBVA: "Creí que era una aventura y en realidad era la vida". 
 
Completar un diario que puede tener premio. Si no que se lo digan a Marta Medina, de Salamanca, que repite en la edición de este año después de haber escrito el mejor diario en la Ruta BBVA de 2013. Así que dos por uno al poder visitar Panamá, Bélgica y Francia el año pasado y éste, Perú. Marta es, con 18 años, una veterana entre sus compañeros de andanza. "La expedición nos permite conocer lugares lejanos pero, al final, me quedo con la gente y las personas de diferentes países. Es lo que más te marca", confesó hoy durante la visita al Museo del Pan.
 
En el mismo sentido se pronunció Inés Peña, de Valladolid y con 17 años, que calificó la experiencia de "impresionante". Ha hecho buenas migas con sus compañeros de América y reconoció que esperaba más intensidad, con aventura y caminatas. La llegada a la provincia de Valladolid le ha hecho sentir "en mi tierra y en mi casa". Además, le ha servido para trasladar a ruteros de otros países las costumbres y culturas de Castilla y León.
 
Helena Escrig, también de Valladolid y con 16 años, apuntó que el viaje ha sido "totalmente inesperado". Tanto que aseguró que "todo lo que te esperas, al final es mucho más". Reconoció que, ahora, está cansada pero no se olvida de los buenos momentos que ha vivido en el último mes. "Ha habido mucho compañerismo, mucha unión y siempre existía gente amable dispuesta a ayudarte", precisa. Preguntada con qué se queda de la expedición, guarda el recuerdo de una caminata por un desierto de Perú, después de acampar en la playa.
 
Elena Prieto, de 16 años y natural de Salamanca, declaró su ilusión por haber superado las pruebas de acceso a la Ruta BBVA 2014. Recordó que presentó un trabajo literario y un proyecto de emprendimiento social sobre Perú. "La experiencia ha sido mejor de lo que me esperaba", aseveró.
 
Lali Herrero, de 16 años, es otra de las participantes de León que también destacó el buen ambiente y las amistades que ha fraguado con las componentes de su grupo, en especial con una chica de Cáceres, Madrid y otra de Perú. Tanto que ya las ha invitado a ir a su ciudad. Además, valoró la posibilidad de conocer otras culturales y conocer los contrastes de un país como Perú, donde ha podido ver zonas deprimidas y pobres. Eso sí, esperaba una expedición con más pruebas físicas.
 
Algo a lo que dio respuesta Ana Gonzalo, una monitora salmantina de 24 años. No en vano, explicó que cada edición tiene un perfil y en esta ocasión tocaba algo más cultural y fomentar el compromiso social. También, señaló que realizar aventura y practicar deportes en una zona andina, con una altitud por encima de los 3.000 metros, limita las opciones para evitar el cansancio o los desfallecimientos.
 
Ana y Antonio Cebas, de Aranda de Duero (Burgos) han sido los dos únicos monitores de la Comunidad. A lo largo de un mes, la joven ha tenido a su cargo a un grupo de 21 chicas, 11 americanas y 10 españolas, al que ha guiado en todo momento y ha solucionado los posibles problemas. Su labor ha sido trasladar las consignas de sus jefes pero afirmó que lo más importante ha sido ganarse la confianza de los chavales.
 
Pese a haber disfrutado de otra manera de la Ruta BBVA, Ana consideró que la experiencia ha sido muy positiva al conocer a gentes de todos los lugares y visitar el sur de Perú, como la grata impresión que le causó el pequeño pueblo de Chivay, a más de 3.000 metros de altura. Su vivencia como monitora le ha hecho repensar su futuro y no descarta ir a Sudamérica para formarse (es licenciada en Educación Física) o trabajar. "Acumulamos mucho cansancio pero ha sido un viaje único y, tal vez, irrepetible", consideró.
 
Otra de las integrantes de la aventura de la Comunidad es Irene Barahona, procedente de Zamora, que reconocía su pena por acabar la expedición. "Estoy convencida que nunca más volveré a vivir algo así", decía, pese a contar con 17 años. Su objetivo, ahora, es no perder el contacto con sus compañeros, especialmente con los de Castilla y León, por la cercanía. No en vano, se refirió a ellos como su "otra familia". Se queda con los pequeños momentos y las anécdotas que pasó, por ejemplo, en las tiendas.
 
Más aventura. Celia García, de Valladolid, es con 15 años una de las benjaminas. También es de las que ha echado de menos la aventura, "dormir menos en polideportivos y más en tiendas, con caminatas". Ana Callejo, de Segovia, reconoció las ganas por volver a su casa para disfrutar de una buena ducha o su cama. Además, espera poder visitar Perú "con más calma", aunque ya no será igual porque no estarán sus compañeros ruteros.
 
José Luis de la Torre, de Guardo (Palencia), consideró que la Ruta BBVA ha cumplido todas sus expectativas porque piensa que "no hay que hacerse ideas preconcebidas" pese a existir menos aventura que otras ediciones. "He vivido experiencias que nunca olvidaré y que recordaré cuando tenga tiempo para reflexionar", precisó. Incluso se mostró convencido que la expedición "te cambia la vida y va marcar el futuro de muchos de nosotros".
 
En su caso, la experiencia le ha servido para ser más sociable y para conocer otras visiones del mundo. "Vengo de un pueblo pequeño y aquí hemos coincidido personas muy diferentes pero creo que, al final, somos iguales al defender valores como el respeto y las ganas de pasarlo bien", consideró.
 
Visita a la provincia de Valladolid
 
Durante su estancia por España desde el 7 de julio, los más de 200 jóvenes han visitado Madrid, La Rioja, Navarra y Bilbao para profundizar en la figura del navarro Juan de Goyeneche, impresor desde 1697 de La Gaceta de Madrid, aunque también ha habido una parada en la provincia de Valladolid.
 
En concreto han hecho noche en Santervás de Campos, localidad natal de Juan Ponce de León, con motivo del quinto centenario de su nombramiento como Adelantado de la Florida. Pero, si algo caracteriza a la Ruta BBVA (antes conocida como Quetzal) es que está plagada de actividades. La agenda está de lo más apretada y ayer, por ejemplo, los jóvenes madrugaron para ver una exhibición y otras labores agrícolas para luego visitar una planta deshidratadora de forrajes.