Voy a confesar que tenía una idea perfecta para esta crónica (irreverente la llama mi jefe) de la Feria y Fiestas. La vi claramente el día que pude leer entero el programa preparado por el nuevo equipo de Gobierno (unos días antes que todos vosotros, lo reconozco). La crónica en sí no tenía título, pero hablaba de Ana Obregón, Los Brincos, Malena Gracia y Tócame ‘la polla’. Venga va, si siguen leyendo luego lo explico mejor.

El caso es que se me había pasado por alto un detalle. Y no es pequeño. Yo, un asiduo de los bares, de los pinchos, de alternar... no había caído (quizá víctima del jet lag vacacional y de mis incursiones por la arena blanca de las playas de este país) que este año, la Feria de Día me va a atracar. Sí, sí, porque que me cobren 2,80 euros (‘solamente’ 30 céntimos más que los últimos diez años) por un pincho más bebida estos días suena a eso, a atraco.

Y me explico. Porque nunca se puede generalizar. Pincho más bebida por menos de 3 euros parece un precio razonable para esta nuestra ciudad. Pero con matices. No es lo mismo una caña que un corto (y todos sabemos qué cada caseta decide en qué vaso da la bebida), una croqueta que un arroz, un bocadito que un bocadillo. ¿Me entienden? Si a esto añado la campaña de vasos reutilizables... vamos, ¡que vaya yo de caseta en caseta con mi propio vaso! Nosotros somos cuatro. Si quieren que la ciudad esté en la calle no me ayudan. Cuatro consumiciones en cuatro casetas diferentes son 45 euros. No hay presupuesto familiar que se lo pueda permitir. Y encima me quedo con hambre.

Por atenuar. Me dicen que esos 2,80 euros es precio máximo, que se puede mantener el del año pasado, es decir 2,50 (el que proponen las casetas regionales). Me dicen que los pinchos cada año se superan y dan mejor servicio. Me dicen que soy un exagerado.

¿Ana Obregón? Vamos al lío. ¿Alguien se ha leído al completo el programa? De verdad, lo pregunto sin ningún tipo de doble intención. Bueno sí, intenciones buenas tengo pocas. ¿Por qué pregunto eso? Porque normalmente nos quedamos en la monda, en el Pregón de los Celtas y su canción !Por ser de Valladolid! -una crítica pequeña, creo que la letra es demasiado deportiva para unas fiestas patronales-, en las zonas de casetas, en los conciertos de la Plaza Mayor y los toreros que vienen a Valladolid. Buscamos alguna novedad, pocas este 2015 pese al cambio de gobierno; o lo que de verdad nos interesa, teatro, música, zonas infantiles...

Pues si echan un vistazo, no digo que se lo empollen y sepan más que la concejala de estos festejos, Ana Redondo, si no que le dediquen media horilla, verán que en Valladolid siempre juntamos a los que parece que no quieren estarlo. El año pasado a Bisbal y Chenoa, y este a Martes y Trece, o sea a Josema Yuste y Millán Salcedo (vale, vale, no actuarán juntos ni el mismo día, pero por aquí andarán). Malena Gracia, Charo Reina, Arévalo, Bertín Osborne, Anthony Blake... y Ana Obregón. Sí, sí, sí, leen bien, Ana Obregón, que triunfa con una obra de teatro, también estarán en Valladolid. Junto a Los Brincos, el Duende Eléctrico... vamos que somos unos clásicos (alguno dice casposo). Yo me quedo más con Tócame ‘la polla’ (versiones de La Polla Records), por aquello de querer recordar mis épocas juveniles.

Bueno, pues seguimos. Habrá más actividades en los barrios, en los centros cívicos, en las plazas... pero, perdón, ¿qué es un encierro ecológico? Para los no entendidos suena a algo light, pero vete tú a saber.

Y otra pregunta, ¿por qué en un programa de fiestas se integra un apartado que pone visitas turísticas guiadas? Pero si apostamos por atraer gente a Valladolid con un descuento del 30% en todos los trenes de alta velocidad que llegan a la capital, ¿por qué incitamos a ir a Alba de Tormes o Ávila -dos sitios, por otro lado, extraordinarios-? El caso es que me quedo con un paseo en barco o cualquier otra ruta, que bien puedo hacer otro día del año.

Me dicen los entendidos que el programa en sí tiene novedades. Yo veo pocas pero las disfrutaré igual. En la calle, donde me gusta estar... aunque lo de los 2,80 euros sigo sin verlo. Este año afinaré más a la hora de elegir casetas.

¡Ah! y un consejo para el alcalde. En su saluda no separe sujeto de predicado con comas. Con cariño.