«La llegada de Pastor se ve con ilusión y expectación en Hungría»

Manuel Belver
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Chema Rodríguez, ex del BM Valladolid y hoy en el Vészprem, tendrá al técnico como máximo rival el año que viene: «Con un equipo como el Pick Szeged puede hacer grandes cosas»

«La llegada de Pastor se ve con ilusión y expectación en Hungría»

Chema Rodríguez lleva ya media temporada en Hungría. Hasta allí se fue de la mano de Antonio Carlos Ortega y junto a otros ex Asobal, como Cristian Ugalde, Marco Oneto, Laszlo Nagy  o Mirko Alilovic para integrarse en el Vészprem. La Liga magiar está en pleno crecimiento y la próxima temporada recibirá a Juan Carlos Pastor, que dirigirá al Pick Szeged, máximo rival del hoy equipo del central español en todas las competiciones del país -«es como un Barcelona-Atlético en lo deportivo o un BM Valladolid-Ademar. Es el partido más importante del año», resumía ayer el palentino, en declaraciones a Onda Cero, sobre el choque entre ambos-.

El central conoce muy bien a Pastor y asegura que en Hungría puede triunfar. «Estoy muy contento de que venga y la pena es que lo haga a un equipo que va a ser nuestro máximo rival. Sé de su calidad como técnico, si no es el mejor es uno de los mejores; tenerlo como rival será muy bueno porque nos hará mejorar, pero somos cautos porque sé de lo que es capaz. Y con un equipo como el Pick Szeged puede hacer grandes cosas», afirma sobre sus posibilidades. Va más lejos sobre cómo ha sentado su fichaje allí: «Todos en Hungría conocen la trayectoria de Pastor. Se están haciendo muy bien las cosas, quieren que la Liga sea un poco más fuerte y que los equipos vayan creciendo, porque eso ayuda a que su selección esté mejor. Su llegada se ve con mucha ilusión y expectación. Muchos compañeros me preguntan por él, por su forma de trabajar».    

Chema está estos días viendo y disfrutando del Mundial en su país y confía en la selección: «Creo que tiene muchas opciones, en los últimos campeonatos ha estado siempre arriba. Ahora, jugando en casa, tiene un plus más, y con la suerte de estar en el lado de los cruces buenos -creo que pueden ser más asequibles que en el otro lado del cuadro-».

Túnez 2005. Hace ocho años, el central, por entonces en las filas del Balonmano Valladolid, vivió el mayor éxito de la selección es sus propias carnes, dirigiendo a un combinado entrenado por Pastor. «La verdad es que fue una época un poco complicada, con elecciones a la presidencia por medio... A Juan Carlos le llamaron en el último momento, hizo un bloque a su gusto, con jugadores que muchos no habíamos ido a la selección. Al principio fue muy criticado, pero se hizo una de las mayores gestas del balonmano español», recuerda: «Para muchos de los que estábamos allí, algo impensable».

Ahora, lejos de su Valladolid, se busca, como él dice que hacen muchos españoles, el futuro lejos de su tierra.