La Policía Local denuncia a 31 autocares escolares por incumplir la normativa

Redacción
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La gran mayoría de las infracciones se refieren a deficiencias técnicas y mecánicas de los vehículos y una mínima parte a cuestiones de documentaciones y autorizaciones

La Policía Municipal concluye que el transporte escolar en la ciudad de Valladolid podría calificarse de "seguro", en base a la información recabada durante una campaña de control a este servicio entre los días 30 de noviembre y 4 de diciembre. Esta actuación se cerró con un total de 31 vehículos denunciados, de los cuales se propuso nueva inspección a 14, para comprobar si habían subsanado las deficiencias detectadas.

El objetivo de la campaña era comprobar que el servicio de transporte escolar de la ciudad cumple con la normativa vigente, así como denunciar todas las infracciones detectadas y analizar, y en su caso determinar, si el servicio puede ser considerado seguro, o en su caso tomar las medidas necesarias para mejorarlo.

La campaña concluyó con el resultado de 38 inspecciones realizadas en once colegios de la ciudad. De los vehículos inspeccionados se levantaron 13 actas tramitadas a la administración competente sobre transporte terrestre y 41 denuncias dirigidas a la DGT. De la totalidad de vehículos inspeccionados, se denunció a 31 de ellos, y se propuso para nueva inspección a 14 con el objeto de comprobar si se habían subsanado las deficiencias detectadas y denunciadas.

En esta edición 2015, se continuó con los parámetros de inspección de campañas de años anteriores, en base a los contenidos de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres. Así, entre otras comprobaciones, se realizó la prueba de alcoholemia a todos los conductores inspeccionados, se contabilizó el número de alumnos que viajaban en cada vehículo y se comprobó el nivel de conocimiento de guías - acompañantes para valorar su capacidad de reacción en caso de siniestro.

Respecto a la tipología de infracciones, -tanto a la Ley de Transportes como a la normativa de Tráfico-, la gran mayoría afecta a deficiencias técnicas y mecánicas de los vehículos, propias de las revisiones en ITV, y una mínima parte a cuestiones de documentaciones y autorizaciones.