La carretera N-601 concentra tres de los cuatro tramos más peligrosos de Valladolid

A. G. Mozo
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El último informe del RACC sitúa dos de ellos en la zona norte, entre La Mudarra y Rioseco, y desde Becilla hasta el límite con León, y el tercero, en el tramo de Olmedo · La carretera con mayor riesgo, la N-610 · La más segura, la VA-30

Accidente en la N-601, en el que se vieron involucrados un camión y dos coches.

La N-601 concentra tres de los cuatro tramos con mayor riesgo de sufrir un accidente de la red de carrreteras vallisoletana, si bien el punto más peligroso se encuentra en la N-610, en las carcanías del término municipal de Villafrades. Situación opuesta a las de las dos rondas de Valladolid, que serían dos de las vías más seguras de la provincia. Todo son datos que se desprenden del último EuroRAP, el informe que elabora el RACC y en el que el Real Automóvil Club de Cataluña se encarga de cruzar los datos de siniestralidad que se han contabilizado en cada tramo a lo largo de los últimos tres años, con la intensidad media de vehículos que soporta cada vía.

El único ‘punto negro’ de la red vallisoletana -su equivalente, ya que la DGT hace ya siete años que desechó esta denominación y este tipo de informes- se encuentra, por tanto, en la N-610 en la zona de Villafrades, en un punto por el que pasan poco más de dos mil coches o camiones al día, pero que arroja una media de un accidente al año.

Los otros tres tramos con alto riesgo de accidentes estarían en la N-601. Dos de ellos se encuentran en la parte norte de esta carretera, en lo que algún día será la A-60 (la autovía Valladolid-León). Se trata de los 13,6 kilómetros que van de La Mudarra a Medina de Rioseco (con una intensidad media de 5.000 vehículos y una ratio de 1,7 siniestros al año) y de los 24 que van desde Becilla de Valderaduey hasta la provincia de León (2.345 coches y 1,3 accidentes). El tercero estaría en la parte sur, del límite con la provincia de Segovia hasta Olmedo (3.440 vehículos y una media de 0,7 siniestros).

El EuroRAP es un estudio que gradúa por colores el riesgo y que coloca en negro a los tramos de riesgo muy elevado de sufrir un accidente, en rojo a puntos como esos de la N-601 y en verde, a aquellos en los que el riesgo es muy bajo o que, incluso, tal como ocurre con la VA-30, la VA-20 y en un par de puntos de la N-122, es prácticamente inexistente.

Estas cuatro carreteras se llevan la mejor parte de este EuroRAP 2014 en el que aparecen 27 tramos y 551,9 kilómetros. De ellos, 518,8 (en 23 tramos) estarían calificados como de riesgo bajo o muy bajo. Así, por ejemplo, señala que en la Ronda Exterior, pese a registrar una intensidad diaria de más de 26.000 vehículos, durante estos tres últimos años (el informe hace referencia a los datos relativos a 2011, 2012 y 2013) se ha anotado una media de cero accidentes. Lo mismo ocurre en la N-122, entre La Cistérniga (donde es autovía) y Quintanilla, aunque con mucho menos tráfico (poco más de 3.000 al día). También como de riesgo muy bajo califica el RACC a los 11,3 kilómetros de VA-20 (con una intensidad de 26.000 vehículos y un promedio de 0,3 accidentes al año); el tramo entre Boecillo y Mojados de la N-601; y dos de la A-62, el que va de Venta de Baños a Cigales y el que comprende la zona de Arroyo hasta Tordesillas.

El grueso de los tramos que se han estudiado en este informe se encuadran dentro del calificado como nivel amarillo, en el que el riesgo es bajo. Ahí aparecerían 16 tramos, repartidos casi todos por autovías como la A-6 (cuatro), la A-11 (tres) y la A-62 (dos), pero también por las principales vías nacionales y, así, aparecen cuatro de la N-601 (tanto en su tramo sur, de Olmedo a Valladolid, como en el norte, hacia Rioseco), dos de la N-122 y uno de la N-610, que es la que recorre la provincia por el norte.
Después habría un tramo en el que el riesgo se entiende como moderado, en la carretera N-601 desde el límite con la provincia de Segovia hasta Olmedo y los otros cuatro ya reseñados al principio en los que el riesgo de accidente es alto o muy alto.