El candidato socialista a la presidencia de la Junta, Luis Tudanca, inició ayer su carrera hacia la victoria electoral el próximo mes de mayo con el aval y la presencia de Pedro Sánchez. Arropado por cerca de mil personas, el burgalés escogió su ciudad para presentar oficialmente su candidatura a presidir un gobierno socialista en Castilla y León, donde únicamente Demetrio Madrid, presente en el acto, ha roto el monólogo del Partido Popular.
Luis Tudanca, que cerró el acto con una larga intervención, garantizó que abordará seriamente el problema de la despoblación y para ello «no vamos a permitir seguir siendo invisibles». El dirigente socialista se comprometió a «darle voz a esa España vacía en los debates» con un proyecto que luche por la repoblación, si sale elegido presidente de la Junta.
En este sentido, Tudanca apostó por incrementar la voz de Castilla y León, ya que «esta es una tierra que no quiere ser más, pero que no vamos a tolerar ser menos que nadie». Así, expresó su deseo de que «como presidente de la Junta» quiere darle voz a esa España vacía en los debates y «ofrecerles un futuro mejor para que nuestros hijos y nietos puedan crear un proyecto de vida en su tierra». Por ello, el líder autonómico socialista prometió la realización de «un proyecto que luche por la repoblación de Castilla y León».
El candidato destacó que la despoblación que sufre la Comunidad no es «la causa sino la consecuencia» de «la falta de empleo y oportunidades» que expulsa a los jóvenes de Castilla y León, por ello «el PSOE ha peleado tanto para la firma de un pacto industrial» y consideró imprescindible «reducir los desequilibrios territoriales» mediante la creación de los planes territoriales de fomento.
Unidad. Tras las intervenciones del candidato local, Daniel de la Rosa, y de la secretaria provincial, Esther Peña, el secretario general y presidente del Gobierno dio paso a un Luis Tudanca que se emocionó en algunos momentos. El dirigente recordó que el largo camino recorrido durante sus cuatro años como secretario autonómico ha servido para construir un partido «unido» en torno a un proyecto «sólido», lo que sitúa al PSOE de Castilla y León preparado para «recuperar el Gobierno de Castilla y León». Asimismo, y fiel al compromiso adquirido en su día con la militancia y la sociedad en general, subrayó haber desarrollado «una intensa labor mirando a los ojos de la gente, recorriendo miles de kilómetros por las nueve provincias y pisando barro» porque, según enfatizó, «la buena política se hace con los pies».