Detenidos por vender a su hija de 11 años a un clan de La Seca a cambio de 17.000 €

A. G. Mozo
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La Guardia Civil ha arrestado a cinco personas, los padres de la niña y los compradores, un matrimonio afincado en La Seca que adquirió a la menor para casarla con su hijo, de 19 años · Dos de ellos han ingresado en prisión

Una investigación de más de un año de la Guardia Civil ha servido para liberar a una niña de once años que, presuntamente, estaba siendo amenazada, maltratada, vejada y explotada tanto laboral como sexualmente en una casa de La Seca. La menor fue vendida por sus propios padres a este clan a cambio de 17.000 euros, dentro de un acuerdo matrimonial para casarla con un joven de 19 años, único hijo de este clan afincado en la provincia vallisoletana y que se dedica a la agricultura.

Pero lo que era un arreglo entre dos familias para que sus hijos se casasen celebrando una fiesta de compromiso en Rumanía -previo pago, siempre, de esos 17.000 €-, en realidad terminó convirtiéndose en una relación de esclavitud, ya que el clan de La Seca obligaba a la niña a trabajar en el campo (en la recogida de uva y patatas), «con jornadas laborales intensas» y «sin recibir ninguna remuneración», según detallaron fuentes del caso a El Día de Valladolid. Además, la menor era forzada a mantener relaciones sexuales con el joven elegido para ser su marido, ocho años mayor que ella y ya adulto (19).

Operación Cachiseca. Todo ello desembocó en la denominada operación Cachiseca, que se ha desarrollado en los últimos días en las provincias de Valladolid y Sevilla. Agentes de las unidades de Policía Judicial de la Guardia Civil de ambas comandancias llevaban con este caso un año, desde que se tuvo conocimiento -en mayo de 2014- de la venta de una menor de edad entre dos clanes de origen rumano.

Además de la liberación de la niña -que fue enviada en bus con sus padres en cuando el clan de los compradores se percató de la investigación policial-, la Guardia Civil ha conseguido arrestar a los cinco presuntos implicados en la trama, algunos de los cuales se les imputan hasta seis delitos: trata de seres humanos, malos tratos, hurto, abuso y agresión sexual, y explotación laboral. Los cinco arrestados son los padres de esta niña, de 42 y 41 años (de iniciales C.T. y G.T.), el joven con el que la casaron (M.I.B.) y los padres de este, de 39 y 40 años (G.B. y T.B.) y presuntos compradores. La juez de guardia de Medina del Campo, que instruye la causa, ordenó el ingreso en prisión de G.B. y M.I.B., 'suegro' y ‘marido’ de la niña de 11 años, mientras que decretó la puesta en libertad con cargos de los otros detenidos.

Llamada de socorro. En el transcurso de la investigación, la Guardia Civil no solo descubrió la situación de esclavitud a la que el clan de La Seca sometía a la niña y que había sido vendida como una mercancía más, sino también que la propia menor había llegado efectuar una llamada de socorro a su madre en la que la relató los malos tratos, los abusos sexuales, los insultos, las vejaciones y hasta el robo de los pendientes que ella siempre llevaba -los padres de su ‘marido’ se los arrancaron de las orejas «de forma violenta» como parte de «la compensación por la deuda contraída por sus padres», según detallaron estas mismas fuentes a este diario- por parte de su nueva familia.

La madre, entonces, se puso en contacto con los miembros del otro clan para recuperarla, pero solamente obtuvo una respuesta: el regreso de su hija a la vivienda familiar de Sanlúcar la Mayor valía 10.000 euros.

La niña fue finalmente liberada por el clan de La Seca, pero solo cuando ellos se percataron de la presencia de la Guardia Civil, ya que eran totalmente conscientes de que habían cometido varios delitos con la compra de la menor y los posteriores malos tratos y abusos que le habrían propinado durante meses.

Los padres de la niña de 11 años están acusados de un delito trata de seres humanos, mientras que a los tres miembros del clan comprador deberán responder, además, de los de malos tratos, hurto, abuso y agresión sexual, y explotación laboral.