La Guardia Civil investiga el doble asalto sufrido estas navidades por el estanquero de Geria, primero en su local y después en su vehículo, y que habría perdido más de diez mil euros en tabaco. Los dos robos se concentran en una franja de solo ocho días y todo hace pensar que podría haber sido obra de un único grupo que habría aprovechado el primer atraco para clonar la llave del coche de la víctima y esperar a que fuera a comprar más tabaco para su comercio.

Todo empezó en la madrugada del pasado 18 de diciembre, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil. Un grupo de ladrones entró durante la noche en el inmueble que es, a la vez, el domicilio de los estanqueros y la tienda, situada en la planta baja. Al parecer, forzaron la puerta trasera de la vivienda y, una vez dentro, forzaron la que une la casa con el estanco. Y todo ello, sin que las víctimas escucharan a los ladrones transitar por su casa. Finalmente, según estas mismas fuentes, se hicieron con un botín cercano a los cinco mil euros.

El robo fue denunciado ante la Guardia Civil esa misma mañana, pero lo que no podía imaginar el estanquero es que la historia se iba a repetir apenas una semana más tarde. Fue el día 26 de diciembre, cuando se produjo el otro asalto justo cuando regresaba de comprar tabaco y paró en el banco. La banda de ladrones abrió su vehículo y lo vació literalmente; otros 5.000 euros en mercancía. Todo ello, sin forzar la cerradura, por lo que se investiga si pudieron hacer una clonación de la llave durante el asalto del día 18 y, a partir de ahí, seguir los movimientos de la víctima.

VIGILANCIAS

Hace dos meses, la Guardia Civil ya desarticuló una banda de ladrones de estancos que se dedicaba a efectuar vigilancias en la sede de Logista España para seguir a los camiones que llevan los pedidos y determinar la cantidad de mercancía que se descargaba en cada estanco. La organización, que estaba radicada en Madrid, ya fue desmantelada y se determinó que había estado detrás de los robos a dos expendedurías de Medina de Rioseco y Villalón, donde lograron llevarse tabaco y dinero por valor de 203.255 euros. Actuaban solo en zonas rurales y usaban dos tipos de vehículos, coches para hacer las vigilancias y furgonetas de alquiler para el robo y transporte del botín.