El desarrollo tecnológico ha generado un nuevo ‘argot’ en el que se enmarca el término de ciberseguridad, que define las herramientas, políticas, acciones o prácticas destinadas a proteger a las organizaciones y usuarios de los ataques y amenazas existentes en el ciberentorno. Y en este ámbito de la ciberseguridad y de la protección de los asaltos maliciosos, Castilla y León, y más concretamente la provincia de León, está intentando posicionarse en un lugar de privilegio, no solo a nivel nacional, sino incluso internacional. Es uno de los objetivos de la Asociación Empresarial Innovadora (AEI) Ciberseguridad y Tecnologías Avanzadas, una agrupación de empresas que buscan potenciar el ecosistema tecnológico a las principales compañías de las nuevas tecnologías.
Dio sus primeros pasos a raíz de la presencia en León del Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (Inteco), actual Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), que es un organismo que ha permitido la generación de un factor diferenciador respecto a esta actividad en otras comunidades. «Todo lo que hay en ciberseguridad lo marca Incibe», reconoce el presidente de la AEI Ciberseguridad y Tecnologías Avanzadas, Tomás Castro en declaraciones a Ical.
El impulso que se dio desde Europa para la creación de este tipo de agrupaciones propició los pasos iniciales de la primera figura TIC en Castilla y León y en España, la AEI Movilidad, ubicada en Valladolid en torno al centro de movilidad de Microsoft, pero «no se consiguió que tomara fuerza y hoy en día la referencia en movilidad está en Barcelona», explica Castro, en concreto en el Mobile World Congress (MWC) que se celebra en la Ciudad Condal. Un poco más tarde, en septiembre de 2009, nació la AEI Seguridad en torno al ‘polo tecnológico’ que se estaba generando alrededor del entonces Inteco enfocada a la seguridad de la información, y cuatro años más tarde, en 2013, pasó a denominarse AEI Ciberseguridad y Tecnologías Avanzadas.
Lo que se ha hecho para esta unificación ha sido «aprovechar las sinergias» de ambas asociaciones para hacer de León y de Castilla y León «un referente» así como «el centro de la ciberseguridad en España», reconoce Tomás Castro. Y es que la interconexión que existe a día de hoy ha generado «nuevas formas de hacer el mal» contra las que hay que luchar y para lo que los países «no están muy preparados», añade.
El casi medio centenar de miembros que componen la AEI Ciberseguridad y Tecnologías Avanzadas abogan por la unión para fomentar la innovación, promover y facilitar la implantación de servicios empresariales y tecnológicos, mejorar la competitividad, promover la formación especializada o sensibilizar a la sociedad y a las administraciones de la importancia de las nuevas tecnologías para el crecimiento económico de un entorno social y también de la ciberseguridad para la seguridad de las empresas y ciudadanos.
afectado por la crisis. El sector de la ciberseguridad experimentó un importante crecimiento hasta el año 2008 y tal era su fortaleza que un año más tarde se presentaba como uno de los más resistentes a las dificultades que estaba generando la crisis económica. Pero esta también se dejó notar en este ámbito, que durante los cuatro años siguientes ha visto cómo se reducía el número de empresas TIC, aunque la evolución empresarial ha sido muy dispar.
Alrededor del 54 por ciento de los puestos de trabajo ofertados por las empresas requieren de una formación sólida en tecnologías de la información y la comunicación, aunque las titulaciones de informática son las más demandadas.