El centro de Valladolid no sumará más peatonalizaciones este mandato. Una decisión del equipo de Gobierno que incluye mantener abierta al tráfico la calle Claudio Moyano, aunque la idea que se manejaba desde principios de año era la contraria. Esta decisión se ha tomado en función de la opinión de los comerciantes de la zona, que piden un análisis profundo de la decisión, rechazan el modelo que se empleó inicialmente en la calle Regalado y apuestan por peatonalizaciones con plataforma única, según explica el concejal de Movilidad, Luis Vélez. 

 El anuncio de la posible peatonalización de esta calle ser realizó en febrero de este año, coincidiendo con la reordenación de las líneas de Auvasa y el cambio de sentido de un tramo de María de Molina. El propio alcalde apuntó esta posibilidad porque se trata de una calle que «no tiene aparcamientos a lo largo de su trazado, es muy estrecha y las aceras también lo son», pero también detalló que este tipo de decisiones deben tomarse «de forma dialogada y consensuada». Después de meses de reuniones y de estudios, la Concejalía de Movilidad ha decidido «descartar» esta opción este mandato, pero Luis Vélez reitera que «en el futuro será peatonal». 

Además, el balance de la reorganización del tráfico en esta calle es «positivo» y con repercusión «beneficiosa» para calles como la de Duque de la Victoria. Este descenso del tráfico en la zona ayudará a diseñar de forma global el futuro del eje entre Regalado, Duque de la Victoria y Claudio Moyano. Para afrontar esta peatonalización, el área de Movilidad debe garantizar que se puede «dar servicio al carga y descarga, a los residentes y los comerciantes de la zona», detalla. Aunque considera que más de 35 años después de la peatonalización de la calle Santiago «sería importante concluir y eliminar el peligro que supone para los peatones el cruce con Claudio Moyano».

Plaza San Juan. La decisión de no afrontar nuevas peatonalizaciones no evita otras actuaciones como la que se están llevando a cabo en la plaza Luis Braille, donde se ganará espacio para los peatones. Además, la Concejalía de Movilidad también tiene previsto cerrar al tráfico el lateral de la plaza de San Juan que comunica con la calle Maldonado con Don Sancho para mejorar la seguridad de los peatones. Eso sí, se mantendrá la salida por la calle Reyes a la calle Cardenal Mendoza.

Esta es una de las medidas de «pacificación» del tráfico que se aplicarán en breve para «primar» al peatón. Aunque la principal actuación que se ha ejecutado durante este mandato es la red de ciclo-carriles, que «está a punto» de cerrarse en todo el centro, además de extenderse a barrios como La Rondilla o a zonas como el Camino del Cabildo, donde también se ha instalado un cinemómetro para «concienciar» sobre los límites de velocidad a los conductores.

Señalización. El concejal también apunta que en los últimos meses se han instalado «muchas señales luminosas» en distintos pasos de peatones de la capital. Esto se complementa con nuevas regulaciones semafóricas en la carretera de Fuensaldaña, la avenida Ramón y Cajal, Miguel Íscar y dos más en el Camino Viejo de Simancas.

El listado de medidas para controlar la velocidad de los vehículos y mejorar la seguridad de los peatones también está la colocación de algunos elementos reductores en Barrio España, en calles interiores por donde no circula el transporte público. Además, en la calle Val de Arán y en Fuente Berrocal se está probando el funcionamiento de un sistema denominado ‘cojines berlineses’, que según el concejal está funcionando «bien».

El Ayuntamiento también está aplicando pintura antideslizante en señalización horizontal, una medida que Vélez recuerda que es muy demandada tanto por los peatones como por los motoristas.

Mesa de Seguridad Vial. Unas medidas que no han evitado un repunte de los siniestros de tráfico en la capital, donde cinco de los ocho fallecidos este año han sido peatones. Una situación que se analizará la próxima semana en la reunión de la Mesa por la Seguridad Vial.

En este órgano no formal, que se puso en marcha a propuesta de la Plataforma Motera de la Seguridad, se debatirán propuestas como la que se aprobó en el pasado Pleno a instancia de Sí Se Puede Valladolid de instar al Gobierno a modificar el Reglamento General de Circulación rebajar el límite de velocidad de 30 km/hora. Una idea que ya había avanzado el propio alcalde, a finales de noviembre, cuando apostó por realizar un estudio «a fondo» que lleve a un «plan serio» con medidas para reducir la siniestralidad en el tráfico, como podría extender a más zonas de la ciudad la reducción de la velocidad máxima a 30 kh/hora.

Un cambio que ya tiene fecha porque la Dirección General de Tráfico (DGT) reducirá el límite de velocidad a todos los vehículos con motor que circulen por calles de un único sentido en todas las ciudades a partir de julio de 2019. 

Patinetes. Otro asunto pendiente en la capital es la normativa de los patinetes. La DGT trabaja ya en una regulación mínima a través de medidas urgentes que podrían entrar en funcionamiento este verano. Mientras, Luis Vélez se muestra partidario de que los patinetes no «ocupen el espacio» de los peatones, sino que lo compartan con las bicicletas. De hecho, considera que los vehículos de movilidad personal (VMP) «han pasado prácticamente por encima a todos» ya que la sociedad y los ciudadanos «han ido muy por delante de la normativa», como informa Europa Press.

Vélez apunta que la situación real en la capital es que «los patinetes puede circular casi por ningún punto de Valladolid». Por eso, el Ayuntamiento elaborará una normativa que «lo mas razonable» es que sea una nueva ordenanza conjunta de movilidad que agrupe la actual ordenanza de bicicleta, mejore la regulación de los VMP, y actualice el «obsoleto» reglamento municipal de tráfico. Ypide reclamado a los usuarios de patinete «prudencia» para que no asuman riesgos ni personales ni para otros usuarios.