Un joven de 24 años terminó su noche de fiesta en el calabozo de la comisaría, detenido por delitos de amenazas y resistencia a los agentes de la Policía Local que le fueron a buscar después de que, presuntamente, protagonizara un espectacular accidente en plena plaza Circular cuando, según los testigos que le vieron huir, podía ir en estado ebrio.
Presuntamente porque, según informaron fuentes de la Policía Local, él alegó que no había sido él quien ‘aparcó’ su Audi A3 sobre la acera y contra un semáforo de la Circular. «Él decía que le habían robado el coche», explicaron estas mismas fuentes.
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Un conductor se empotra en la Circular y se da a la fuga. - Foto: D.V.
Estado en el que quedó el Mégane del conductor que dio 1,30. - Foto: D.V.
El accidente se produjo sobre las 3.45 horas de la madrugada del martes al miércoles. El Audi A3 del detenido terminó sobre la acera y causando cuantiosos daños en las baldosas de la acera, la papelera, la valla y el semáforo. El conductor se dio a la fuga, pero fue localizado poco después por la Policía Local en su casa de La Rondilla. Allí, se negó a salir del piso para hablar con los agentes y, ante la insistencia de sus padres para que lo hiciese, se puso «violento» y, presuntamente, les amenazó con un cuchillo, tal y como explicaron fuentes policiales este periódico. A las 5.10 terminaba la noche en comisaría.
Cinco veces más. El de la plaza Circular no fue el único accidente de la noche. A las 4.20 horas, otro conductor empotraba su Renault Mégane contra un semáforo en la confluencia de la calle Panaderos y la plaza del Caño Argales. Terminó imputado por un delito contra la seguridad vial, ya que quintuplicó la tasa máxima permitida, al dar 1,30 de alcohol.