Diez conductores imputados este fin de semana por delitos contra la seguridad vial en Valladolid y su entorno. De ellos, siete iban ebrios al volante, con tasas que en alguno de los casos llegaban -además de a suponer la comisión de un delito penal- a sextuplicar el máximo autorizado de 0,25. Los otros tres eran personas que circulaban en motos sin haber obtenido nunca el permiso correspondiente o en un coche pese a que ya no tenía ninguno de sus puntos en el carné.
El caso más grave se registró a las 5.20 horas de la madrugada del pasado sábado al domingo en el barrio de La Rondilla. La Policía Local había montado un control de alcoholemia preventivo en la calle Cardenal Torquemada y hasta allí llegó el conductor -del que no ha trascendido ni sexo ni edad- de un Ford Kuga. Después de pasar por el alcoholímetro, acabó con una cita en el juzgado de guardia tras ser imputado por un delito contra la seguridad vial, debido a que superó, y con creces, no solo los 0,25 (miligramos de alcohol por litro de aire espirado) que marcan el límite máximo para la imposición de una multa, sino también los 0,60 que convierten las alcoholemias positivas en un delito. Es más, hasta duplicó esta última tasa (y sextuplicó la de 0,25) con su 1,42.
No muy lejos del ‘récord’ del fin de semana establecido en ese control del barrio de La Rondilla se quedó un joven de 28 años al que la Guardia Civil de Tráfico sorprendió un par de horas más tarde (7.05 del domingo) en las inmediaciones de Zaratán. Había cometido una infracción, se le dio el alto e iba con una tasa de 1,23, es decir, duplicando el límite de 0,60 y quintuplicando la máxima autorizada.
En la VA-20. El ‘podio’ del fin de semana lo completó, la tarde del domingo (a las 20.00 horas), una señora de 64 años que se vio involucrada en un accidente con dos heridos leves en la VA-20 (la Ronda Interior, en el kilómetro 6, a la altura del cruce con Camino de Hornillos). La patrulla de la Guardia Civil de Tráfico efectuó pruebas de alcoholemia a todos los implicados y esta sexagenaria arrojó esos 0,98 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
A la lista de positivos se unen dos más en controles preventivos de la Policía Local (uno dio 0,50 y otro, 0,61); otro en un accidente registrado en la calle Pólvora a las 3.00 horas del domingo, en el que un motorista se empotró contra un coche que había aparcado y en el control dio 0,71; y el último, en la calle La Rábida, tras cometer una infracción, arrojando una tasa de 0,81.
La cuantía de la multa oscila entre 500 euros y cuatro puntos (para las tasas de entre 0,25 y 0,50), 1.000 euros y los mismos puntos (si hay reincidencia) y el mismo dinero y seis punto (si se está entre 0,51 y 0,60). Además, si se incurre en delito, en el Código Penal se fijan penas de entre tres y seis meses de prisión o multa de seis a doce meses, sin olvidar que lleva aparejado también la pérdida del derecho a conducir entre uno y cuatro años.
Sin carné o sin puntos. Los otros tres conductores imputados el fin de semana fueron un joven de 19 años al que la Guardia Civil sorprendió en Aldeamayor de San Martín a bordo de un ciclomotor sin tener el oportuno permiso; un hombre 38 años que iba en otra moto por Renedo no solo sin la licencia, sino también sin llevar puesto el casco; y otro de 51 años que fue parado en un control en San Vicente del Palacio con todos los puntos de su carné retirados.