El Papa clama contra el machismo en África

AGENCIAS
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Francisco condena la violencia doméstica, la «arrogancia masculina» y el aborto en una multitudinaria eucaristía en Nairobi

La segunda jornada del Papa Francisco en Kenia estuvo ayer llena de gestos. Primero, el Pontífice tuvo un encuentro interreligioso y ecuménico en la Nunciatura, donde resaltó la importancia del diálogo en un mundo «herido por conflictos y religiones», luego, el Santo Padre se dio un multitudinario baño de masas, a pesar de la lluvia, en una ceremonia religiosa en la Universidad de Nairobi y por último ofreció un discurso en la sede de la ONU.

En su homilía en el campus, Bergoglio instó a los feligreses a rechazar la violencia doméstica y la «arrogancia» masculina.

«Estamos llamados a resistir prácticas que fomenten la arrogancia en los hombres, que hieran o menosprecien a las mujeres y que amenacen la vida de los inocentes no nacidos», indicó.

Francisco se refirió de ese modo a los altos índices de violencia contra las mujeres que se registran en la sociedad del país africano.

En su sermón, el Obispo de Roma hizo un llamamiento a los fieles a «ocuparse siempre de las necesidades de la gente pobre» y a trabajar contra la desigualdad y la discriminación.

A pesar de la climatología adversa, los congregados hicieron fila para entrar en el campus y participar activamente en la misa,

El numeroso público que se citó en la Universidad para ver y escuchar al Santo Padre se mostró animoso y lleno de júbilo. Así,  Mary Waithera afirmó al ver a Francisco que «la alegría de verle me llega al corazón»

Algunos de los fieles que vitorearon al Pontífice llegaron de lugares tan lejanos como Burundi o Sudán del Sur. «Los corazones de todo el mundo se han rendido a su visita a Kenia», anotó Peter Kangethe Gathiga, uno de los creyentes presentes en el campus.

La ceremonia celebrada ayer será probablemente el acto más multitudinario del primer viaje de Francisco a África, que durará seis días y que le llevará mañana a Uganda y el próximo domingo a la República Centroafricana.

Por último, en la sede de la ONU en Nairobi, el Papa urgió a detener la cultura consumista «del descarte» y a usar la educación para transformarla en una «cultura del cuidado» mutuo que vele por el medio ambiente, la distribución equitativa de los recursos económicos y el acceso a la Sanidad.