El presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, ya dijo a finales del 2008 que el tren era un elemento muy importante para la logística de la empresa. «El desarrollo del ferrocarril nos haría más competitivos porque es más barato y contamina menos», fueron exactamente sus palabras. Por eso fue una buena noticia que en 2011, en plena crisis, Renfe Mercancías anunciara que a través Grupo CAT, operador logístico de Renault, ponía en marcha un servicio vía ferrocarril que unía Valladolid con las proximidades de Nantes. Eran ocho vagones que tenían capacidad para 96 coches.
Pero eso no es nada comparado con el anuncio que volvió a hacer ayer Renfe. La empresa anunció que ha puesto en marcha otro servicio a través del mismo operador que unirá por ferrocarril Valladolid con la planta de Flins, que está a 47 kilómetros de Francia.
Pero lo novedoso es la envergadura del convoy. Nada menos que 22 vagones que suman 700 metros y que darán la posibilidad de transportar 286 vehículos en un solo viaje, el triple que el servicio presentado en 2011. «El proyecto de Renfe Mercancías y el Grupo CAT busca aportar más competitividad a Renault y ofrecer nuevas opciones a otros fabricantes de la industria del automóvil en España al ser el ferrocarril una pieza clave y necesaria en la cadena logística del sector», señaló ayer Renfe en una nota de prensa.
Según la operadora, los 22 vagones de los primeros trenes serán cargados con el modelo Captur, que se fabrica en exclusiva mundial en Valladolid y que está siendo un éxito rotundo de ventas, hasta el punto de que Renault se ha visto obligado hace algunas semanas a poner en marcha el tercer turno.
Y los argumentos que dio De los Mozos en su día sobre la reducción de la contaminación, un eje muy importante en la estrategia de Renault, fueron reforzados ayer con los datos aportados por Renfe. «El tráfico por ferrocarril supone en este caso un ahorro de 43 toneladas de emisión de gases de efecto invernadero».
Es más, según la operadora, «cada tren de 356 toneladas evita 91,3 MWh (megawatios por hora), que es el consumo eléctrico diario medio de 11.000 hogares.
Pero no solo se trata del medio ambiente. Utilizar el tren es mucho más rentable para Renault que la carretera. «En concepto de costes externos, como la contaminación, los accidentes, el ruído y otros factores, este transporte puede permitir un ahorro estimado por tren de 19.000 euros», sostiene Renfe en su nota de prensa.
El tren que estrenará en breve Renault cargará los 286 vehículos hasta la frontera de Irún / Hendaya en vías de ancho ibérico, y allí se hará en transbordo a otros vagones de Renfe que llegarán hasta Flins ya en vías de ancho internacional.
Grupo CAT no descarta aprovechar este tren para cargar otros modelos que no sean el Captur y poder transportarlos hacia el sur de Francia y a otras zonas de España.