La falta de acuerdo sobre la propiedad de los nuevos talleres de Renfe retrasará nuevamente su puesta en funcionamiento. Las discrepancias entre la operadora ferroviaria y la Sociedad Alta Velocidad sobre si firmar un acuerdo de autorización de uso del Taller Central de Reparaciones (TCR) , que se mantendría en el patrimonio de la Sociedad, o fimar un convenio de permuta del nuevo complejo ferroviario por los terrenos del Paseo de Farnesio, donde están ubicadas las actuales instalaciones ha provocado la paralización el traslado de los trabajadores y la actividad a las nuevas instalaciones del Páramo de San Isidro.
Esta situación se conoció ayer en la reunión de seguimiento de la operación de transformación de la red arterial ferroviaria celebrada en el Ayuntamiento de Valladolid. En este encuentro, el concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, informó al resto de los grupos municipales de las «nuevas» pretensiones de Renfe, que aspira a tener la propiedad del TCR, que se ha sido financiado con fondos de la Sociedad Alta Velocidad.
Una petición que se conoció en una reunión celebrada el pasado 16 de octubre en Madrid y que, en principio, no se admite por los socios de la Sociedad -Ayuntamiento, Junta y Ministerio- por la diferencia de valoración entre los talleres, tasado en unos 160 millones de euros, y los terrenos liberados del Paseo de Farnesio, que tienen un valor de mercado cercano a los 40 millones de euros. «No se puede admitir una permuta con esta diferencia», asegura Saravia, que se muestra muy cauto a la hora de hablar del tema. Eso sí, recuerda que toda la obra de las nuevas instalaciones de la Base de Mantenimiento Integral por Renfe, que han supuesto una inversión total de 142,5 millones, han sido financiadas con la deuda de la Sociedad Alta Velocidad. El concejal de Urbanismo, recuerda que la idea inicial era utilizar la fórmula de la cesión de uso.
Valoración. Por su parte, el portavoz del Partido Popular, Jesús Enríquez, pidió ayer al equipo de Gobierno que «se haga una valoración de las instalaciones ferroviarias» para que la presenten en su reunión del próximo día 2 con directivos del Adif. Enríquez entiende que si el Estado debe a la Sociedad Alta Velocidad «lo lógico es pedir que lo devuelva». Así, sugirió, por ejemplo, que se habilite un plan de pagos para evitar el bloqueo del traslado.
El portavoz del PP explica que si Renfe no se hace propietaria de los terrenos «no se trasladará» y dejará el futuro de la instalación «en el aire».