Los hospitales de Valladolid han conseguido reducir ostensiblemente en los últimos años la estancia media de los pacientes que están ingresados. Se trata de uno de los indicadores que refleja la calidad asistencial de los centros hospitalarios. Según la Encuesta de Morbilidad Hospitalaria recientemente publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la estancia media hospitalaria en Valladolid es de 6,6 días por paciente, la cifra más baja desde que hay datos. De hecho, en 1998 la media era de diez días. Más allá de la gestión sanitaria, el principal factor que explica este progresivo descenso es el avance en ciertas técnicas sanitarias que han facilitado las intervenciones quirúrgicas. Quizá el caso más representativo sea el de la laparoscopia, un método basado en pequeñas incisiones por las que se introducen unos tubos pequeños y largos, ya sea para exploración o para intervención, que evita la cirugía abierta y, por lo tanto, más molestias en el paciente y más tiempo de recuperación.
«La complejidad en la técnica ha mejorado, antes un paciente operado de apendicitis estaba ingresado unos cinco o seis días y ahora se puede ir a casa en 24 o 48 horas», asegura el director general de Asistencia Sanitaria, José Jolín. Según los datos que maneja, la estancia media hospitalaria se sitúa actualmente en los 6,59 días en el Río Hortega, en 7,4 días en el Clínico y en 5,65 días en el hospital de Medina del Campo, que también gestiona Sacyl. «Los hospitales modernos tienen que ser eficaces, lo que se pretende ahora es ambulatorizar los procesos», asegura.
Según los datos del INE, el año pasado se registraron en los hospitales de Valladolid 400.900 estancias (cada uno de los días que un enfermo pasa allí). Pues bien, las causas más habituales son las enfermedades del sistema circulatorio, que sumaron 74.941 estancias, especialmente las relacionadas con el corazón. La segunda enfermedad que generó más estancias en hospitales fue la neoplasias (tumores), con 53.694 días de ingresos. Destacan en este campo los tumores de colon y recto (7.174) y los de tráquea, bronquios y pulmón, sobre todo por tabaquismo (5.217). Las siguientes causas más frecuentes fueron las enfermedades del aparato respiratorio (47.873), las del digestivo (43.750), las lesiones y envenenamiento (39.855), las enfermedades del aparato genitourinario (22.655) y los trastornos mentales (18.937). En términos globales, los tres hospitales de Valladolid registraron un incremento del número de estancias del 0,7 por ciento.
El secretario general del Sindicato Médico CESM-CyL, Mauro Rodríguez, señala que esta reducción de estancias se debe «a la evolución de la medicina» porque no hay «ninguna directriz o presión» para que los médicos den el alta rápidamente. «Esto tiene que ver con la ética, hay que tener en cuenta que ellos son los responsables de ese alta, y no el centro hospitalario», explica. Rodríguez reconoce que no han recibido ninguna queja en el sindicato de médicos que hayan tenido este problema.
«Es un indicador de calidad al que estamos respondiendo»
José Jolín se muestra satisfecho con esta evolución. «Es un indicador de calidad al que Sacyl está respondiendo», señala. Aparte de las nuevas técnicas, hay otros factores que explican la reducción de la estancia media hospitalaria.
Uno de ellos es la apuesta por la cirugía mayor ambulatoria, procesos subsidiarios realizados con anestesia general, local, regional o sedación que requieren cuidados postoperatorios poco intensivos y de corta duración, por lo que no precisan ingreso hospitalario. «También estamos apostando por los hospitales de día, donde los pacientes se pueden ir a casa después de estar en observación», agrega.
Jolín destaca también la importancia de la atención primaria y el cumplimiento del objetivo de que la estancia media por del preoperatorio no sea de más de un día.