Rubén Baraja se estrenó esta temporada como entrenador en el fútbol profesional tras sus pasos por el banquillo del Atlético de Madrid (como ayudante) y del Valencia (en el juvenil). Y quizá el de hoy sea su último encuentro en el Elche. Al menos, así lo apuntan desde tierras ilicitanas tras la rueda de prensa previa al choque ante el Valladolid. «La decisión sobre mi futuro la tengo tomada, pero ahora sólo pienso en el Valladolid», señaló el propio entrenador vallisoletano, añadiendo que «la experiencia la valoro muy positivamente. Desde el minuto 1 que me plantearon venir, no me lo pensé. Ha sido una gran oportunidad para dar muestras de mi capacidad. Ha sido difícil, por todos los inconvenientes que ha conllevado, pero ha sido una experiencia brutal».

 

Baraja acaba contrato este año y aún no tiene una oferta en firme para renovar, por lo que a las despedidas de varios jugadores del Elche, posiblemente se una la de su entrenador.

 

El técnico pidió a los aficionados que reconozcan el trabajo de los jugadores y su esfuerzo. «Vine aquí para trabajar y los objetivos se han ido cumpliendo, no sin dificultades. Algunos podrían pensar que se podría haber hecho más o menos», concluye.