La vida después del ictus

D.V.
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El Colegio de Médicos de Valladolid organiza una jornada dedicada a hablar sobre qué hacer para que la vida del paciente que ha sufrido esta enfermedad neurológica sea lo más fácil y normalizada posible

El Colegio de Médicos conmemoró ayer el Día Mundial del Ictus con una jornada dedicada a descubrir 'La vida después de sufrir un ictus'. Se trata de una enfermedad neurológica que una de cada seis personas sufrirá a lo largo de su vida, según los últimos datos facilitados por la Sociedad Española de Neurología. Esta enfermedad neurológica -que afecta a entre 110.000 y 120.000 personas en España- es la segunda causa de muerte en nuestro país, llegando a colocarse en el primer puesto al hablar de mujeres. También es la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto y la segunda causa de demencia. Aunque puede darse a cualquier edad, las posibilidades aumentan considerablemente a partir de los 60 o 65 años.

Sin embargo, a pesar de estas elevadas cifras, la mortalidad por sufrir un ictus isquémico es de entre un 9 y un 10%, cifras que ascienden al 25-30% si hablamos de un ictus hemorrágico. Existe mucha gente que debe aprender a vivir tras un episodio como ese. Para facilitar esta tarea,

El doctor Juan Francisco Arenillas Lara, jefe de Servicio de Neurología del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, fue el primero en intervenir para exponer su ponencia “Avances en la estrategia de atención al ictus en Castilla y León”.

“La tasa de supervivencia al hablar del ictus es muy alta, pero la mayoría de la gente que lo sufre necesita neurorehabilitación posteriormente, además de apoyo para reinsertarse en la sociedad. El proceso que llega después de sufrir el ictus es la gran asignatura pendiente que tenemos ahora por delante”, aseguró Arenillas.

Tenemos que tener en cuenta que algunas de las secuelas más comunes en pacientes con esta enfermedad neurológica son problemas de movilidad, alteraciones del lenguaje y memoria, o depresión. Por ello, tener a gente cerca que pueda prestarles toda la ayuda que requieran es fundamental para hacerles la vida más fácil y conseguir que “el paciente siga siendo él misma como persona, no solo consiguiendo que se mueva como un robot”, apuntó el Jefe del Servicio de Neurología del Clínico.

La relevancia de la comprensión y el apoyo de los familiares fue otro de los aspectos que se trató en esta jornada, que contó con una mesa redonda en la que se destacó la importancia del abordaje integral del paciente tras sufrir el ictus. Ana Isabel Martín Pérez, supervisora de enfermería del Servicio de Neurología (4ª Sur) del Clínico, y . Verónica Olmedo, trabajadora social del citado hospital, protagonizaron un debate en el que se habló acerca de “¿Qué pasa en la vida de la persona y familia después de sufrir un ictus?”, donde los presentes pudieron escuchar testimonios reales de pacientes y familiares. 

Para terminar, David Pisonero Nieto, entrenador del club de balonmano Atlético Valladolid, presentó la campaña de sensibilización ciudadana y prevención del ictus a través del deporte 'Muévete contra el ictus'.