La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) trasladó hoy su solidaridad al agente y al cuerpo de Policía Local de Valladolid agredido durante estas fiestas y pidió que se refuercen las medidas por parte de las administraciones con los empleados de los servicios públicos que sufren este tipo de acciones.

En un comunicado recogido por Ical, CSIF indica que, lamentablemente, los agentes locales de Valladolid sufren una media de una o dos agresiones diarias, especialmente a partir del jueves, con la llegada del fin de semana. En concreto, el agente herido intervenía para mediar en una pelea entre dos jóvenes, al parecer motivada por una cuestión de celos, cuando uno de ellos reaccionó agresivamente contra el policía.

Para el representante de Seguridad de CSIF en el Ayuntamiento de Valladolid, Raúl Castrillo, el hecho de que la Policía Local atienda la seguridad y orden público y que, por tanto, se le presupone mayores riesgos en el ejercicio de su trabajo, “esto no significa que los policías locales puedan ser agredidos gratuitamente, o que se les falte al respeto con impunidad”.

Según Raúl Castrillo, la circunstancia de que la agresión se haya producido durante las ferias de Valladolid tampoco es una excusa que “suavice” la valoración de la agresión como “algo más normal o posible”. Por el contrario, remarca que “un policía local es un empleado público más, que no tiene por qué recibir agresiones en el desempeño de su trabajo, al igual que ocurre en otras profesiones que están en contacto permanente con el ciudadano, como puedan ser los profesionales sanitarios o educativos”.

CSIF pide a las administraciones que se solidaricen con los empleados de los servicios públicos agredidos, como ha sido el caso de este agente local, y que refuercen los esfuerzos y las medidas para evitar las agresiones a los diferentes profesionales de los servicios públicos, que suman más de 300 denuncias en el último año en la ciudad de Valladolid, especialmente en el ámbito sanitario, educación o seguridad. Más del 80 por ciento de las agresiones son verbales (insultos, amenazas, gritos) y el resto son físicas.

También, ofrece su colaboración a las administraciones públicas con centros de trabajo en Valladolid para realizar una campaña de sensibilización dirigida a los usuarios, en la que se refuerce, conciencie y valore la labor de los empleados públicos y se les dote de la autoridad que les corresponde.

“Es necesario crear un clima de respeto y seguridad en las relaciones entre los profesionales de los servicios públicos y los ciudadanos”, recalca el sindicato independiente. Además, recuerda que las agresiones a los empleados públicos pueden conllevar, incluso, penas de cárcel.