De jugador a presidente

Manuel Belver
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Iván Corrales jugó de 2004 a 2008 en el CB Valladolid. «Fueron unos años de muy buenos recuerdos, pese a un final en el que no dimos con la tecla», señala el base, hoy presidente del Sant Adrià y ayudante de entrenador en el CB Prat en LEB Oro

Iván Corrales, de jugador a presidente

Comenzó su carrera en el UB Sant Adrià (UBSA) en Barcelona y allí se retiró hace unos años. «La gente se reía cuando aún estaba en ACB y decía que mi sueño era acabar jugando en el equipo en el que empecé», recuerda. Aunque la realidad es que Iván Corrales, base que llegó a ser internacional en una veintena de ocasiones y que militó en cinco clubes diferente de la ACB y uno de la Lega italiana, dio sus primeros pasos en el mundo del basket en Escola Betsaida de la mano de Joan Plaza (ex del Joventut o Real Madrid y hoy técnico del Zenit de San Petersburgo): «Propuso montar una escuela. En el colegio solo había una pista de baloncesto en un patio pequeño así que solo había esa opción». De ahí ya pasó a Sant Adrià.

Iván Corrales nació el 12 de julio de 1974 en Plasencia (Cáceres). Su familia es extremeña aunque a los dos años emigró a Barcelona. Allí comenzó a jugar al basket de la mano de Plaza -«después de mis padres, la persona más importante»-. De hecho, con él paso de Betsaida al Sant Adrià: «Nos fuimos en preinfantiles todo el equipo y el propio Plaza». Y en juvenil de primer año a la Penya: «Hay una anécdota de aquello. Me pusieron en el equipo B y yo me quería ir porque entendía que debía estar en el A. Mis padres y Joan me convencieron para quedarme».

Con el Joventut debutó en la ACB, categoría en la que llegó a jugar 386 partidos, anotando 2.628 puntos con una media de 22 minutos por encuentro. En 1990 se fue a Sevilla, en 2001 a Cantabria Lobos, en 2002 a Baskonia y en 2003 a Tenerife, donde estuvo con Paco García. «Estuve a punto de renovar, pero destituyeron a Paco y me llegó la oferta del Fórum», recuerda sobre su llegada a Valladolid, de la mano de un Manel Comas que le quería con interés.

Iván Corrales, de jugador a presidenteIván Corrales, de jugador a presidenteFirmó un 2+2. «Me costó adaptarme porque llegaba de Tenerife y fueron muchos cambios de golpe», añade. Pero se adaptó y jugó 125 encuentros con la camiseta morada. Con Román Montañez, Guillermo Rejón, Óscar Yebra, San Emeterio, Rodrigo San Miguel... «Hicimos una piña», recuerda.

«Fueron cuatro años de muy buenos recuerdos, de hacer amigos, tener gente alrededor del equipo que merecía mucho la pena», señala acordándose del doctor Javier Alonso; el fisioterapeuta Miguel Ángel Salcedo; el preparador físico Javi Bello; el segundo entrenador, Roberto González; el delegado, Benito... «Hubo situaciones duras y esa piña nos ayudó», añade, poniendo también el foco en jugadores extranjeros, como Carlton Myers, Bernard Hopkins o Nikola Radulovic. Sin olvidar a gente de fuera del basket, como Germán Delibes.

En Valladolid disfrutó durante cuatro años dentro de la pista pese a que el final no fue el deseado: «En esas temporadas hubo aciertos y errores. Y en la última no dimos con la tecla. Siempre lo he dicho, otros años lo habíamos hecho pero ése no lo hicimos». Y el CB Valladolid descendió a la LEB Oro tras una segunda vuelta horrorosa: «Tras ello la mayoría nos fuimos». También Corrales, que jugó las dos siguientes campañas en Burgos, luego en Fundación Adepal en Alcázar de San Juan para volverse a casa, a Sant Adrià de Besos. 

«Empecé jugando, poco a poco entrenando a algunos equipos de la base y ayudando a la directiva hasta que un día me plantean ser el presidente. De primeras pensé que era una broma». Y no lo fue. De hecho, el que fuese campeón de la Euroliga o de la Copa del Rey; y plata con la selección en un Eurobasket, llegó a compaginar su faceta de jugador y presidente.

Sigue como esto último, aunque asegura que no manda de manera unilateral y que el club es un consenso entre coordinadores y directivos. Además, entrena a un equipo de Mini. Y esta temporada compagina todo esto con el cargo de entrenador ayudante de Daniel Miret en el CB Prat en LEB Oro: «No vamos bien en la clasificación pero el trabajo está siendo bueno».

A Valladolid viene todos los veranos. Realmente va a la bodega de Santi en Cubillas de Santa Marta, con un grupo de amigos de su etapa aquí;y de allí se viene a la capital pucelana.