Cantidad y calidad. Ése es el deseo de todos los viticultores y bodegueros de las doce denominaciones de origen (DO) de Castilla y León, quien a lo largo de esta semana generalizarán los trabajos de vendimia con una previsión que anuncia ausencia de lluvias. Lo recogido hasta ahora invita al optimismo con una cantidad bastante ajustada a la producción media de cada denominación y una calidad de niveles muy altos, rozando la excelencia en muchas zonas.

«Muy equilibrada» es la expresión que emplea Antonio Lubiano, subdirector de Calidad del Instituto Agrario de Castilla y León (Itacyl), para definir la cosecha. «La cantidad varía, en Ribera es previsible que suba mientras en Rueda baja, pero la calidad es perfecta», explica.

Lubiano, que considera fundamental que no se produzcan lluvias a lo largo de esta semana y la próxima, avanza la situación en Ribera del Duero y Rueda, las dos grandes zonas de la Comunidad donde se recoge prácticamente la mitad de la producción regional.

La vendimia en Rueda está prácticamente finalizada, ya que comenzó a finales del mes de agosto, y se alcanzarán entre 95 y 96 millones de kilos con una maduración perfecta. Jesús Díez, director técnico de la DO, explica que apenas resta un millón de kilos para concluir la cosecha en las 55 bodegas que reciben uva.

«Calidad perfecta y una sanidad sin problemas componen una vendimia de nivel alto», afirma Díez, quien explica la peculiar característica en esta denominación, donde el 90 de la producción se recoge por la noche. «Se comienza a vendimiar entre nueve y diez de la noche y se trabaja hasta las once o doce de la mañana para mantener las condiciones de temperatura y evitar las oxidaciones en el fruto», indica Díez.

La producción en las 13.000 hectáreas de la denominación de origen será normal, teniendo en cuenta que los más de 100 millones de kilos del pasado año fue algo excepcional debido a las lluvias caídas justamente antes de la vendimia, que aumentó el peso de la uva. No obstante, Díez asegura que «la calidad prima sobre la cantidad y este año es perfecta».

Ribera del Duero. La otra gran zona castellana y leonesa es Ribera del Duero, que integra municipios de cuatro provincias, y donde la vendimia se generalizará a lo largo de esta semana. «Las últimas lluvias no han sido importantes y han servido para engordar la uva, por lo que habrá una buena cosecha», indica Lubiano.

Esta situación puede llegar a ser óptima si se cumplen las previsiones y no llueve durante las próximas dos semanas, ya que el azúcar y la acidez están perfectos y la uva llega en torno a los 14 grados de alcohol.

A pesar de que el viernes pasado tan sólo había 80 bodegas abiertas, ayer ya alcanzaban las 130 (la mitad más o menos de las que se esperan) y en los próximos días irán aumentando de forma masiva. Alberto Tobes, jefe del servicio de Experimentación y Ensayo de la Denominación de Origen, indicó que el domingo a las doce de la noche ya habían entrado en la DO más de 11 millones de kilos, con una sanidad y una calidad excelentes.

La vendimia se prolongará hasta después de la fiesta del Pilar, el 12 de octubre, ya que algunas bodegas no han iniciado la recogida porque la uva está sana y aún hay tiempo de mejora para vendimiarla en el momento ótpimo. Tobes explica que, además de la ausencia de lluvias, lo ideal es que durante el día se alcancen 20 ó 25 grados y por la noche descienda hasta los 4-6 grados, con lo que las uvas ganan azúcar y mejoran los aromas.

Bierzo y Toro. Otra de las zonas donde está finalizando la vendimia es la denominación de origen Bierzo, cuya recogida está en la recta final. Carmen Gómez, directora técnica de la DO, explica que ya se encuentran en bodega unos 13 millones de los 16 previstos para esta campaña.

La producción será similar a la de los últimos años, aunque aún queda pendiente de vendimiar algunas parcelitas donde madura más tarde la uva y zonas del este de la denominación (Ponferrada, Bembibre...), a quienes también ha perjudicado algo la celebración del Mundial de Ciclismo, según dice Gómez.

La calidad es buena porque casi todo es viñedo viejo y se recoge con mesa de selección, por lo que algunas uvas ‘tocadas’ por las abundantes lluvias de las últimas semanas se han retirado y no han llegado a la bodega.

Finalmente, Toro es otra de las denominaciones importantes de la Comunidad. Tras un verano seco, lo que ha permitido una uva sana sin problemas fitosanitarios, se inició la vendimia hacia mediados de septiembre. La producción será similar a la del pasado año (entre 20 y 21 millones) y ya se ha sobrepasado la mitad (11 millones recogidos). José Amancio Moyano, presidente de la DO Toro, confirma que «la calidad es mejor que el año pasado, con una maduración muy buena que no se ha visto afectada por la lluvia de las últimas semanas».

El resto de las zonas vitivinícolas continúan la vendimia con unas buenas expectativas, que luego se tienen que ver confirmadas con el trabajo de los enólogos en las bodegas para que los vinos elaborados obtengan una calificación acorde con la excepcional calidad y la buena sanidad que tiene la uva que ya se ha recogido en las denominaciones de origen.