Nacho González: «El ascenso tiene que estar en nuestras cabezas»

Manuel Belver
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El entrenador del Atlético Valladolid, aunque no oculta cuál es el objetivo final, quiere marcarse primero pequeños retos

A sus 28 años, Nacho González parece ya un veterano de los banquillos, con 1 campaña en la Asobal y esta segunda que arrancará el fin de semana en la División de Honor Plata. Sabe que su Atlético Valladolid es uno de los favoritos para el ascenso, aunque no quiere que eso se convierta en una pesada losa y habla de objetivos a corto plazo para alcanzar el verdadero y último, subir a Asobal.

Quedan cuatro días para que comience una nueva temporada, ¿cómo la afronta su equipo?

Creo que es una temporada de asentarnos. El año pasado era el de conocer la categoría, de ir poco a poco. Ahora tenemos que ir con ilusión y con la responsabilidad de competir e intentar ganar todos los días. La pretemporada ha ido bien aunque quizá un poco corto, con cinco semanas, pero son las circunstancias que hay.

¿La palabra ascenso está en sus cabezas?

Sí, tiene que estar. El año pasado lo rondamos y rozamos con la punta de los dedos. Y el deportista siempre quiere mejorar y si lo hacemos, ya sea de una u otra forma, tendríamos el ascenso. Pero hay que ser conscientes de la dificultad, es un año en el que todos se han reforzado mucho. Si solo estamos centrados desde el principio en eso nos puede pasar factura, tenemos que centrarnos en mejorar y competir, día a día, progresar en nuestro juego, y si lo hacemos tendremos más cerca el objetivo final. Pero tenemos que buscar pequeños objetivos de mejora para luego tener más cerca el final.

Por eso, se entiende que puede ser una presión añadida porque el año pasado lo tuvieron cerca y en este se han reforzado con gente de Asobal.

Creo que eso está claro, no lo podemos obviar. Hay que saber convivir con eso y trabajar en función a eso. Por eso voy a lo anterior, no fijarnos solo en el objetivo final sino tener cosas en el día a día para ir progresando. Si desde el primer día solo pensamos en el ascenso y las cosas no salen como nos gustaría es probable que el equipo se venga abajo. Tenemos que ser previsibles con cualquier circunstancia.

Además del Atlético Valladolid, ¿quién más puede ser favorito?

Los que hemos rondado el ascenso, como puede ser Bidasoa; los recién descendidos y luego Nava, Palma del Río, que ha hecho un equipo para intentar volver a la máxima categoría. Además hay buenas plantillas, como la del Grupo Covadonga, con gente veterana; La Roca, Bordils... todas las plantillas están mejoradas respecto al año pasado.

A nivel de club, ¿ha notado el cambio en la directiva?

Hay cambio en la forma de ser. Dentro de un mismo estilo, de una misma idea de club, cada persona pone su granito de arena y su forma de ser a la hora de llevar el club. Juan Carlos Sánchez-Valencia tiene una forma de ser y Mario Arranz, otra. Lo más importante es que haya gente que quiera luchar por el balonmano, en su momento fueron Sánchez-Valencia y Garnacho los que dieron un paso adelante; y ahora es Arranz y su junta directiva. Lo que tienen las dos es que son gente que quieren luchar por el balonmano. Con eso tienen que tener el respeto y ayuda de todo el mundo.

El año pasado fueron unos 1.500 abonados y en este se mantienen las cifras. ¿Motivo de satisfacción?

Sí, desde luego. Y una presión y responsabilidad añadida. Somos Valladolid, una de las cunas del balonmano a nivel nacional y eso se nota. Tenemos que estar orgullosos de ser uno de los clubes con más abonados del balonmano español, quizá solo por delante tengamos a 3-4 clubes de todo el ámbito nacional, y eso tiene que ser un orgullo para la afición, el club y la ciudad.

El debut será este domingo en casa ante Palma del Río. ¿Será habitual jugar en domingo? ¿Qué puede avanzar del rival?

No sabemos. Ahora es algo excepcional por las circunstancias de este fin de semana, primero de las fiestas, con muchas actividades deportivas el sábado por la tarde y se ha considerado que el mejor horario era el domingo por la mañana. A mí personalmente no es uno que me gustaría de forma habitual porque es el día de descanso que damos a los jugadores, algo muy importante en una plantilla semiprofesional.

Palma es un equipo que ha cambiado determinados jugadores importantes, fichando a Agustín Casado que viene de jugar en Huesca; mantienen portería, pivote, equipo correoso y peligroso. Si queremos ganar hay que hacer las cosas muy bien.

A nivel individual Nacho González ya es un veterano a sus 28 años, ¿qué ha cambiado desde su debut en Asobal?

El estilo, los valores y la idea de juego en la que creo la sigo manteniendo. Personalmente son tres años de experiencia y cada uno muy diferente, con circunstancias de club diferentes. Eso enriquece a la persona, he madurado mucho en la forma de ser, de tratar el día a día con los jugadores. Es la gran diferencia de mis primeros años a estos últimos. En ese aprendizaje constante de un entrenador este es otro año diferente a los dos anteriores y que me tiene que hacer crecer como entrenador o persona.

¿Cómo se lidia con veteranos como Fernando, Javi Díaz...?

Siempre digo es que lo más difícil de entrenar a una plantilla con una exigencia alta es la gestión del grupo. El balonmano es el mismo, lo diferente es eso. Y en ese apartado tener jugadores así nos ayuda mucho y a mí personalmente. Además el perfil de estos jugadores, que es gente de la casa o que se va a quedar a vivir en el futuro. Eso hace que todos rememos en la misma dirección. Y yo me apoyo en su experiencia, nos ayudan tanto a mí como a los jóvenes.