El alcalde de Quintanilla de Onésimo dimite y la Alcaldía queda en el aire

R. GRIS
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El hasta ayer alcalde de Quitanilla de Onésimo, Félix Redondo, presentó en un Pleno Extraordinario su renuncia al cargo por motivos «expresamente personales y laborales». El exregidor explicó que su renuncia se debe a un nuevo proyecto laboral. «La semana pasada ya presenté un escrito presentando la renuncia y hoy (por ayer) se formalizó la dimisión», destacó Redondo.

Esa dimisión deja en el aire por el momento la Alcaldía del municipio, ya que la corporación municipal está formada por nueve concejales, tres del PP, otros tres del PSOE y otros tantos de Ciudadanos. Eso hace que tras la dimisión del regidor se abra un nuevo periodo de negociación entre las formaciones para la elección de un nuevo alcalde. «Creo que todos se sentarán a negociar de nuevo para elegir alcalde».

Por el momento, será el teniente de Alcalde, Raúl Piquero, quien se encargue de hacer las funciones de alcalde hasta que se elija uno nuevo. Por el momento no hay ningún plazo establecido para la elección de un nuevo alcalde, aunque después del pleno de ayer los grupos ya se reunieron para entablar los primeros contactos.

Félix Redondo explicó que después de las elecciones surgió este nuevo proyecto y durante varias semanas ha estudiado la posibilidad de compaginar su nueva vida laboral con el cargo en el Ayuntamiento, pero «ha sido imposible. No me gusta hacer las cosas a medias y he tomado una decisión pensando en el pueblo».