El delantero uruguayo del Barcelona, Luis Suárez, fue citado ayer a declarar ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) el próximo 8 de agosto para escuchar sus alegaciones, después de la sanción de nueve partidos internacionales y la inhabilitación durante cuatro meses de «ejercer cualquier clase de actividad relacionada con el fútbol» por morder al defensa italiano Giorgio Chiellini durante un partido del pasado Mundial.

La cita será en el despacho Pinto&Ruíz del Valle -según el portal de noticias ESPN.com-, donde la institución deportiva escuchará al atacante para, posteriormente, tomar una determinación que podría hacer pública en un plazo de unos cuatro días.

De esta forma, el TAS habría aceptado el ‘procedimiento exprés’ solicitado por la Federación uruguaya para tratar de agilizar un procedimiento que le mantendría alejado de los campos de fútbol hasta el próximo 26 de octubre, fecha prevista para el clásico liguero entre el Real Madrid y el Barça.

Se especula con que el tribunal podría estar abierto a permitir al jugador entrenarse y acceder a recintos deportivos, pero es difícil que la sanción en lo relacionado a participar en competiciones y partidos oficiales sea rebajada.

Sin embargo, según apuntó La Vanguardia, el TAS podría reducir el castigo de cuatro a dos meses por lo que el tiempo que el jugador estará sin vestirse de azulgrana quedaría reducido a la mitad.

La desproporcionalidad de la pena y la falta de antecedentes similares llevaría a los jueces de la institución deportiva a resolver a favor de Suárez, según la información. De este modo, y teniendo en cuenta que la sanción empezó a contar desde el momento en que se hizo público, el jugador podría estar disponible para el técnico azulgrana, Luis Enrique, a partir de la segunda jornada de Liga.