Los resultados electores encumbran o ensombrecen a los candidatos dependiendo de los resultados. Y como ocurre en todos los comicios, algunos salen reforzados y, por el contrario, otros no obtienen todo aquello que esperaban. Estas elecciones, donde el PP sale perjudicado en la provincia en comparación con los comicios de 2011, sí dejan algunos municipios de especial relevancia con claro dominio popular. Uno de los vencedores de esta formación es el hasta el momento vicepresidente de la Diputación, Alfonso Centeno. El alcalde de Olmedo ha revalidad su mayoría absoluta al obtener ocho concejales frente a los tres del Partido Socialista. Además, ha salido elegido procurador en las Cortes regionales y abandona la Diputación justo en el momento en el que pierde la mayoría absoluta.
Los triunfadores se han repartido por toda la provincia. El PSOE ha conseguido muy buenos resultados que encumbren a sus alcaldes en Tordesillas y en La Cistérniga. En ambos municipios los resultados se han visto notablemente incrementados en comparación con los comicios de 2011. El regidor de Tordesillas, José Antonio González Poncela, cuenta con la mayoría absoluta y Mariano Suárez se ha quedado a uno, pero contará con el apoyo de Izquierda Unida si fuera necesario. «Si tengo gobernar en solitario porque no es posible alcanzar un acuerdo lo hará sin ningún problema igual que ya lo he hecho durante este mandato», destacó Suárez.
Otro de los grandes triunfadores de la jornada electoral ha sido el candidato del PP en Simancas, Alberto Plaza, quien ha obtenido una mayoría absoluta un poco menos holgada que la heredada de su predecesor en el cargo, Miguel Rodríguez. Ni más ni menos que siete concejales que le sitúan por encima de PSOE y Ciudadanos, que se quedan con seis.
Por último cabe destacar la nueva victoria del alcalde de Tiedra, Nunilo Gato, quien también tendrá la posibilidad de gobernar durante un mandato más en solitario, aunque no estará en la Diputación.
DERROTADOS
Algunos candidatos con mayorías absolutas en el anterior mandato han perdido las elecciones y otros ni siquiera han tenido representación · Algunos miembros de la Diputación Provincial no han conseguido sus alcaldías
Si ha habido una gran sorpresa en estas elecciones, esa ha sido la elección, aunque sin mayoría absoluta, de CI-CCD en el municipio de Íscar. Tras 28 años de gobierno de Alejandro García, del PP, el Ayuntamiento iscariense cambia de bando. El triunfador en este caso es Luis María Martín, quien gobernará bien en solitario o, presumiblemente, en un acuerdo de Gobierno con el PSOE, quien obtuvo dos concejales. Pero también existe la cruz de la moneda y esa está en Marta Merlo, la candidata del PP. La sustituta de Alejandro García tenía el reto de conseguir la Alcaldía, pero se ha quedado muy lejos de esa victoria y tendrá que estar en la oposición, al menos, por un periodo de cuatro años.
Otro de los grandes perdedores de estas elecciones será Óscar Soto. En primer lugar, el partido decidió que no fuera como candidato a la Alcaldía de Tudela de Duero y, posteriormente, tras algunos contactos sobre la posibilidad de formar un partido independiente decidió encabezar la lista del PSOE, pero en Quintanilla de Arriba.
Sin embargo, no ha contado con el apoyo de los vecinos y ni siquiera ha obtenido representación electoral y no formará parte de la corporación municipal.
La diputada de Cooperación, Laura Fernández, es otra de los grandes damnificados, ya que ha perdido la Alcaldía de Langayo y no tendrá más remedio que permanecer en la oposición durante este mandato, lo que pone en duda su continuidad en su cargo dentro de la institución provincial. Algo similar le ha ocurrido a Celiano Vielba, quien ahora ocupa el cargo de diputado por la circunscripción de Medina de Rioseco, pero que ha perdido las elecciones en favor del PSOE.
Izquierda Unida ha dado un espaldarazo en Santovenia de Pisuerga, donde ha conseguido la mayoría. Eso queda en el papel de derrotado al socialista Germán Tejedor, actual acalde en funciones de la localidad.