El Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que Castilla y León perderá población en los próximos 15 años y lo hará de forma notable. En concreto, la proyección señala un descenso de un nueve por ciento, hasta situarse en los 2.271.767 habitantes, lo que supone 223.998 personas menos que los existentes a 1 de enero de este año. La Comunidad, que actualmente cuenta con 2.495.765 ciudadanos censados, será la autonomía con la mayor variación porcentual negativa, por delante de Asturias y Galicia, y la segunda que más habitantes perderá, según la proyección difundida ayer. El informe refleja que la población del país en el periodo comprendido entre 2015 y 2029 descenderá un 2,2 por ciento, por lo que entonces en España residirán 45.894.908 personas, informa Ical.
Castilla y León sufrirá, por tanto, el cambio de tendencia generalizado en todo el país. Hasta ahora, presentaba un balance positivo en el periodo comprendido entre 2002 y 2012. El INE refleja que ganó población en ese tiempo, en concreto creció en 40.925, un 1,7 por ciento. Sin embargo, es una cifra muy inferior a la que perderá en los próximos quince, arrojando así un saldo negativo de más de 180.000 respecto al comienzo de siglo.
El descenso de habitantes tiene su principal origen en el crecimiento vegetativo y en la migración interior. La diferencia entre nacimientos y muertes solo será positiva en tres de las 17 comunidades hasta 2029 y Castilla y León sería una de las tres con peores resultados, con una tasa del 84,2 por mil, sólo superada por Galicia (88,5) y Asturias (106,3). En el polo opuesto, donde se producirían más nacimientos que defunciones según el INE, sólo figuran Baleares (6,1 por 1.000 habitantes), Madrid (14) y Murcia (19,9), además de en Melilla (145,3 ) y Ceuta (86).
Saldo migratorio. De mantenerse las tendencias actuales, el saldo migratorio con el extranjero entre 2014 y 2029, en términos relativos a su tamaño, sería positivo en diez de las comunidades, especialmente en Canarias, Baleares y Principado de Asturias. En valores negativos se situarían la Comunidad Valenciana, Murcia y Melilla. Castilla y León también presenta cifras positivas, con 9,9 por cada 1.000 habitantes y, aunque por detrás de Cantabria y Andalucía. La Comunidad registrará incrementos a partir de 2016 (187), llegando en 2026 a 2.761 y dos años después a 3.018.
En cuanto a la migración interior, Baleares, Comunidad de Madrid y la ciudad autónoma de Melilla serían los territorios que, en términos relativos a su tamaño, atraerían más población procedente del resto de España. Por el contrario, Castilla y León, La Rioja y Andalucía presentarían los saldos migratorios interautonómicos más negativos.
En los últimos 12 años sólo perdieron habitantes Asturias (0,4 por ciento y 3.820 personas). Los mayores incrementos se registraron en Baleares (32 por ciento y 270.244), Melilla (27 por ciento y 17.768) y Canarias (24,1 por ciento y 411.143). En volumen, destacan los aumentos de Cataluña (1.031.366 personas), Andalucía (999.322) y Madrid (890.301).