El Ayuntamiento de La Cistérniga ya ha adjudicado los trabajos para la reurbanización del último de los tramos de la travesía (antigua N-122 ) con el objetivo de concluir todo el trayecto urbano de esta vía después de afrontar obras durante los tres últimos años. En esta ocasión, será el último trayecto en dirección Soria, con una actuación que tendrá un coste estimado de 560.018 euros para afrontar los trabajos en un recorrido cercano a un kilómetro.

El alcalde, Mariano Suárez, indicó que esta será «la última de las actuaciones» que se llevarán a cabo con fondos propios y pertenecientes a los planes provinciales de la Diputación y matizó que las obras tendrán un plazo de ejecución de seis meses y está previsto que comiencen en este mes de febrero. «Yo espero que estén antes de las fiestas del municipio, ya que siempre se acorta algo el plazo que nos dan las empresas».

En concreto, la actuación consistirá en una «completa remodelación» de la calzada, con cambio del saneamiento y rehabilitación de toda la calzada. Se trata de una vía «muy ancha» donde se mantendrá únicamente la calzada y que transcurre desde la rotonda número tres hasta la calle Azuela. En la vía, cerca de las viviendas se encuentran olmas que «representan una parte muy importante» del pueblo y que se acondicionarán en un primer momento. «La calle tendrá una anchura espectacular». Y gracias a ello se podrá continuar la continuación del resto de la vía «hasta la última casa del pueblo». 

Se trabajará también en el alumbrado, colocando nuevas luminarias hasta la salida del municipio en dirección Soria. También está prevista la inclusión de un nuevo carril bici que recorrería todo el pueblo por la antigua N-122, que se prolongaría por toda la antigua carretera nacional desde el comienzo del pueblo hasta su salida. «Con esta última actuación acabaríamos toda la remodelación después de haber invertido cerca de tres millones desde que comenzamos la primera fase en el año 2015».

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