Las frutas, las verduras y la carne de porcino están encareciéndose por momentos en los mercados vallisoletanos hasta registrar una escalada de precios que, en un solo mes, de agosto a septiembre, algunos han experimentado subidas del 20 por ciento. Y es que el veto ruso a la importación de alimentos frescos y de temporada procedentes del occidente europeo, los principales territorios de producción de los frutos más consumidos en verano, está repercutiendo directamente en el bolsillo de los ciudadanos. Se trata de una prohibición que está provocando en las últimas semanas un hundimiento generalizado en origen y una subida en destino en productos como el melocotón, la nectarina o los calabacines.

Pero, ¿quiénes están provocando estas diferencias de precios que acaba pagando el consumidor? El gerente de Mercaolid,Javier Pastor, lo tiene claro:«Las grandes empresas de distribución que, aprovechando el contexto de crisis rusa, y para sacar más beneficio, están provocando una bajada intencionada de precios en origen que, aunque a los productores les está costando mucho recuperar los valores del comienzo de esta campaña veraniega, lo cierto es que en las tiendas acaban vendiéndose con precios más altos con respecto a las semanas anteriores al veto ruso», es decir, que las diferencias son destacables comparando los precios de julio, agosto y septiembre teniendo en cuenta que esta situación surgió en los primeros días de agosto.

El responsable del mercado central, asimismo, explica esta situación en las propias estrategias empresariales que están originando dos efectos agravados:«Indirectos, ante la psicosis que está generando, y los efectos interesados, lo que vienen a traducirse como tácticas de bajada». Es más, para Pastor esta situación ha causado más preocupación «porque ha llegado en el final de la campaña anual de esos productos». En concreto, precisa, las frutas de hueso (melocotón, paraguaya y nectarina) y de semilla (pera y manzana) son las más afectadas aún en el final de su temporada y casi al comienzo de la campaña de cítricos (naranjas y limones), la más importante para el mercado español por el volumen de negocio que supone, donde ya se prevén grandes pérdidas.

Con todo, esta situación afecta a los precios que soporta el consumidor directamente dados los incrementos medios del precio final superiores al 15%para las verduras y hortalizas; del 10%para las frutas y del 2% para la carne de porcino.

Exactamente, los precios de las verduras y hortalizas son los que mayores incrementos han registrado, estando a la cabeza la judía verde que, según el informe de precios municipal realizado en el Mercado de El Campillo, ha pasado de costar 2,17 euros en julio a los 2,45 en agosto -fecha del veto ruso- y 3,11 en septiembre, lo que significa una subida en el último mes del 21,2%. El precio del calabacín en la tienda también ha pasado de 1,02 euros en julio a 1,12 en agosto y 1,38 euros en septiembre, lo que supone un incremento del 19%en un solo mes. El espárrago, por último, se vendía en julio por 1,73 euros y ha pasado a 1,91 euros en agosto y a 2,13 en septiembre, un 10% más.

De frutas, por su parte, destaca la subida del 14,5%de la manzana reineta de agosto a septiembre de 2,21 a 2,53 euros; junto al incremento del precio del melocotón en un 10,4%(de 1,82 a 2,01 euros); la subida de las nectarinas del 8% (de 1,28 a 1,38 euros); el del 7,5% de las peras (de 1,59 a 1,71 euros) y el del precio de las paraguayas del 6%(de 1,53 a 1,63 euros).

En este sentido, apuntar otras cifras aportadas por COAG, que son que el melocotón y la nectarina cuestan 0,20 euros en origen, lo que significa una diferencia porcentual del agricultor al consumidor de 910% y 875%, respectivamente.

Por último, el otro producto que ahora está más caro en las carnicerías es la carne de porcino:el tostón es el que más subida experimenta hasta alcanzar el 3% dado que pasó de 13,09 a 13,5 euros de agosto a septiembre; las costillas aumentaron en la tienda un 1,55% (de 5,06 a 5,14 y la cinta de lomo un 1,2% (de 6,56 a 6,64 euros).

Además, otro de los productos que podría verse afectado por esta crisis rusa es la patata, por la alta producción en esta zona.