Diego Rubio es, por el momento, el último fichaje del Real Valladolid 2015-16. El chileno, con pasaporte alemán (por lo que no ocupa plaza de extranjero), firma por cuatro temporadas y procede del Sporting de Lisboa, que se queda con un 70% de un futurible traspaso. «Agradezco la confianza en mí y el esfuerzo hecho por el club», señaló ayer en su presentación tras asegurar que no le gusta calificarse, «aunque soy hombre de área y, como a todos, me gusta hacer goles».
Más allá de sus cualidades, a las que el director deportivo añadió que es «diferente a lo que teníamos», el caso de Rubio tiene varias anécdotas realacionadas con Valladolid. Una de ellas, la destacó el propio delantero: «Sé que estoy en un gran club, en el que han jugado varios chilenos. Mi padre estuvo a punto de fichar hace tiempo». Hugo Rubio es el progenitor del punta. Fue internacional absoluto chileno y jugó a mediados de los 80 en el Málaga, cuando Pato Yáñez y Jorge Aravena lo hacían en el cuadro blanquivioleta.
Asegura que llega en forma y disponible si el míster lo considera oportuno. De hecho, jugó como titular el domingo con el filial del Sporting de Lisboa. Allí no ha podido demostrar las razones por las que fichó en 2011 del Colo Colo, cuando llegó a ser internacional absoluto: «Tuve algunas oportunidades el primer año pero no se dio. Ahora no quiero pensar en el pasado».
Y el futuro es el Real Valladolid y la Segunda División. «Presión la va a haber siempre, es la Liga española. El año pasado vi varios partido de Segunda y sé es que una Liga dura, tiene calidad y quizá sea un poco más dinámica y fuerte que la Liga portuguesa, salvo los equipos punteros», analizó más en profundidad el delantero sobre la competición.
Hoy será su primer día de entrenamiento con la camiseta blanquivioleta. Y se encontrará con sus rivales por la titularidad en la delantera, Rodri y Erick Moreno: «Hay varios jugadores en la misma posicion pero la competencia es buena».
Con familia política en Valladolid
Además de que su padre tuviese opciones de jugar en el Real Valladolid, a Diego Rubio le unen más cosas con la capital castellana. Su mujer, la sevillana Rocío Navarro, cuenta con varios familiares a orillas del Pisuerga, entre ellos sus abuelos. De hecho, el propio delantero estuvo en noviembre de visita en Valladolid y ayer mismo recordaba a la perfección dónde vivían. «El hecho de que tenga familiares por parte de mi mujer ayuda», reconoció el punta chileno.
Además, varios de esos familiares son abonados del Real Valladolid, como se reconoció desde el propio club en boca de su director deportivo.
Diego Rubio, con esos cuatro años firmados, se convierte en el futbolista con el contrato más largo en el Real Valladolid.