El Grupo Popular rechazó ayer la acusación de ocultismo realizada por el alcalde y defendió que la situación financiera de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad es de sobra conocida. «Sus cuentas son públicas y se depositan cada año en el registro mercantil», aseguraron en una nota de prensa.

Los ‘populares’ argumentan que el desfase entre el crédito y los ingresos por la venta de parcelas, que financia en gran medida la operación, «exige que se siga escrupulosamente el calendario previsto sin demoras». Recuerdan que para vender este suelo es necesaria la liberación de los terrenos que ocupan los talleres de Renfe y la transmisión de la propiedad del suelo liberado a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad. Así, advierten al alcalde que si quiere seguir con el proyecto debe impulsar estas actuaciones, «en vez de formular acusaciones falsas». Por último, entienden que la situación «saneada» de las arcas municipales, con un endeudamiento por debajo del 50%, permitiría afrontar la parte correspondiente al 25% e la deuda en la Sociedad Valladolid Alta Velocidad 2003.