El debate que enfrentó  ayer entre los dos candidatos del PSOE en las primarias, que se celebrarán el domingo, sirvió para contraponer dos propuestas basadas en la misma ideología pero con aplicaciones muy diferentes. En esta confrontación inédita hasta ahora en la política municipal,  Cecilio Vadillo, exsubdelegado del Gobierno, y Óscar Puente, actual presidente del Grupo Municipal Socialista, repasaron sus trayectorias políticas y dieron cuenta de cuál sería su modelo de ciudad ante los representantes de los medios de comunicación convocados en la sede provincial del partido.

Vadillo, que abrió la ronda de intervenciones en un encuentro moderado por el periodista de la Cadena Ser José María de Francisco, reiteró que se presenta porque «Valladolid necesita un cambio y el PSOE también». Su propuesta la resumió en «hacer una nueva ciudad, una ciudad de las personas para las personas». En esa línea, apostó por mejorar los servicios públicos y dar prioridad a las políticas sociales y de empleo.

La réplica de Puente llegó con un relato detallado de su trabajo durante estos últimos siete años en la oposición municipal. En este sentido, reiteró que se ha preparado «a fondo» para poder optar a la Alcaldía. «Tengo la ciudad en la cabeza y me avala mi trabajo, esfuerzo y coherencia», dijo.

Una afirmación que provocó  la primera matización de Vadillo, que le espetó: «no dudo de tu trabajo y honestidad, pero eso ha dado escasos resultados». Puente recogió el guante para replicar que ahora «los socialistas no piensan en el 2011 sino en el 2015» y pidió a los militantes que el domingo elijan la persona «mejor preparada» para recuperar el Ayuntamiento.

El presidente del Grupo Socialista rehuyó la confrontación con su compañero, con quien aseguró que le unen más cosas de las que le separan. Eso sí, se cuestionó si al vivir Vadillo en Pedrajas de San Esteban puede conocer los problemas de Valladolid. Una duda que zanjó Vadillo al afirmar que tiene una casa en la capital y lleva dos años empadronado aquí. Reiteró su intención de trasladarse a Las Delicias si es elegido alcalde y recordó que durante sus años como subdelegado trabajó «intensamente» por Valladolid.

economía y empleo

PLAN ESTRATÉGICO INDUSTRIAL FRENTE A PLAN DE EMPLEO MUNICIPAL

El debate se dividió en tres bloques temáticos,  donde los candidatos hacían una exposición general y se sometían a las preguntas de los periodistas presentes en el mismo.

En el apartado de políticas económicas y de generación de empleo, Puente tomó la iniciativa para recordar que el Grupo Socialista había presentado en diciembre de 2013 un plan de empleo municipal, que no se aprobó en el Pleno por la mayoría absoluta del PP. El socialista defendió que los once millones que proponía destinar al mismo podrían generar más de 3.500 puestos de trabajo y reducir la tasa de paro de la ciudad un 10 por ciento.

Por su parte, Vadillo recalcó la necesidad de dotar a la capital de un plan estratégico industrial y de desarrollo económico. En ese proyecto matizó que se apostaría por el desarrollo de suelo industrial y la explotación de nuevos yacimientos de empleo. Una propuesta que mereció el apoyo de su compañero, que apostó por diseñar el futuro de Valladolid «entre todos y olvidar el ordeno y mando del alcalde».

Una coincidencia que se extendió cuándo se les planteó qué medidas pondrían en marcha para apoyar el pequeño comercio del centro. Ambos apostaron por aplicar medidas para defender este  sector, aunque Vadillo se decantó por aprovechar las inercias que generan los centros comerciales del alfoz. Por su parte, Puente criticó la política de traslado de sede oficiales desde el centro a los nuevos barrios y se mostró partidario de, si no hay financiación, situar el Campus de la Justicia en alguno de los edificios vacíos del casco histórico.

Alguna coincidencia y más discrepancias generó también el proyecto del soterramiento. Vadillo lo definió como una inversión esencial, donde hace falta el apoyo del Gobierno central, mientras Puente lo situó en la agenda oculta del PP porque «no se conoce cómo se pagarán las deudas, ni la valoración del suelo con el que se financiará el proyecto».

POLÍTICA SOCIAL

PLAN DE EMERGENCIA SOCIAL FRENTE A UN PROGRAMA DE POLÍTICA SOCIAL

En el apartado de política sociales volvieron los reproches. Vadillo mostró su sorpresa porque Puente hubiera presentado hace días una veintena de  propuestas para reducir las desigualdades sociales en la ciudad. El exsubdelegado le reprochó que «venda» su gestión en la oposición cuando es  su «trabajo». A lo que su compañero respondió que «el proceso de primarias no puede parar el trabajo municipal». Aunque luego cuando hablaron de propuestas concretas ambos volvieron a encontrar puntos de confluencia, ya que Vadillo enumeró propuestas  de política social que figuraban en el plan de emergencia social de Puente.

Unas diferencias que abandonaron cuándo se les preguntó por el tema concreto de los desahucios, donde ambos asumieron que la administración municipal debe prestar ayuda a los ciudadanos. En este sentido, también debieron justificar por qué su apuesta social no se ha visualizado con presencia en las protestas. Una pregunta en la que ambos asumieron «los errores», aunque con justificaciones muy dispares.

Una situación que se reprodujo a la hora de abordar posibles pactos con Podemos. Vadillo optó por esperar a las elecciones para ver si «se presentan», pero Puente  aseguró que no se «puede tener miedo a nuevas fuerzas que ni siquiera irán con sus siglas a las municipales». En esa línea, también  eludieron centrar el debate en la figura de León de la Riva.

Modelo de ciudad

LA CUIDAD DE LAS PERSONAS FRENTE A LA CIUDAD COMPACTA Y AUSTERA

El último tramo del debate, el centrado en el modelo de ciudad fue el más abierto. Cada candidato aprovechó para realizar sus planteamientos generales, donde encontraron las mayores coincidencias. Ambos apostaron por la «tolerancia cero» contra la corrupción, por una gestión municipal «austera» y por aplicar «transparencia absoluta» al gobierno municipal.

Vadillo reiteró su modelo de «ciudad de las personas para las personas» y Puente recordó su apuesta por la «regeneración» política, además de por un diseño de ciudad «compacta», donde prime la «movilidad».