El 'loco' argentino

M.B
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Carlos Fenoy defendió la portería del Real Valladolid en 270 partidos oficiales desde 1980 a 1988. Hoy vive en Rosario (Argentina), aunque sigue sufriendo con su Pucela

A Carlos Fenoy se le recuerda por sus paradas en San Mamés, en el Bernabéu, en el Camp Nou o en el José Zorrilla. Por sus estiradas imposibles y sus salidas sin temor al error. También por las broncas a sus defensas cuando entendía que un compañero había errado y por sus respuestas magistrales a cualquier imprevisto: dicen que cuando un balón se iba muy alto, él se daba la vuelta e imitaba a un tirador al plato con una escopeta;o que en La Romareda le tiraron una cerveza desde la grada y él la abrió para darle un sorbo... le apodaban ‘el loco’, como a muchos otros porteros. Porque ese oficio, el de guardameta, siempre ha sido un poco de locos.

 A Valladolid llegó en 1980. Y aquí se quedó hasta 1988. Le quitó el puesto a Manolo Llacer. Y en las ocho temporadas que defendió la portería pucelana n?o hubo nadie que le sacase del once inicial: ni el propio Llacer, ni Montes, ni Sala, ni Rodri, ni Wirth. Fue titular con Cantatore, con Azkargorta, con Pepe Pérez García, con Fernando Redondo, con García Traid, con Mesones y con Paquito.

Carlos Alberto Fenoy Muguerza nació en Buenos Aires el 15 de octubre de 1948 -el mes pasado cumplió 70 años-. Empezó en Argentinos de Rosario y pronto se enroló en las filas del Newell’s Old Boys, «que compró mi pase». A finales del 72 de va al Vélez Sarsfield. En 1976 dio el salto al Viejo Continente de la mano del Celta, donde estuvo cuatro campañas (dos en Primera y dos en Segunda), siendo, como dato curioso, el máximo goleador de los gallegos en la campaña 76-77, con 5 dianas (al lanzar los penaltis).

El Real Valladolid se fijó en él y se lo trajo en 1980. Aunque comenzó en el banquillo, en la segunda jornada ya fue titular y así se mantuvo hasta 1988 cuando, tras no ser renovado, decidió retirarse e irse a Argentina.

Aquí ganó un título, la Copa de la Liga; jugó la UEFA y disputó 270 encuentros oficiales, haciendo un gol, en la temporada 84-85, en Sarriá, batiendo a N’Kono y dando el definitivo 2-2. «Mi mejor recuerdo es de esa Copa de la Liga, de cuando salimos campeones», señala desde su residencia.

Ahora vive en Rosario (Argentina), desvinculado del fútbol ya que abrió un supermercado con su hermano, aunque sufriendo con los partidos de su Pucela. «En casa siempre hay encendida una televisión con deporte. Y sobre todo con fútbol», apostilla su hija, Carla, que estuvo en el José Zorrilla el día del ascenso y en la fiesta del 90ª aniversario del club.

«No he vuelto a Valladolid, pero mantengo contacto con Aramayo y Ramón Martínez a través de mi hija», añade asegurando que sigue al Real Valladolid y todo el fútbol nacional.

Pichichi del Celta en la temporada 76-77

A pesar de ser portero, Fenoy también destacó por una faceta rara por su puesto, la de goleador. De hecho, el argentino fue el pichichi del Celta en la campaña 1976-77 en la máxima categoría. Anotó 5 goles, 4 de penalti (a, entre otros, Arconada) y uno tras un rechazo de Miguel Ángel, el guardameta del Real Madrid. En Valladolid también anotó una diana, de la misma forma de penalti. Fue en Sarriá, ante el Espanyol en la temporada 84-85. Fenoy es el portero que más goles ha marcado en Primera (José Luis Chilavert hizo uno, de penalti, con el Real Zaragoza).