El alcalde de Valladolid explicó este viernes, instantes antes de la inauguración de la 48ª edición de la Feria del Libro de Valladolid, que ante las previsiones de lluvia para los próximos días “una vez más parece que la Cúpula del Milenio es la mejor ubicación” para el certamen, “para que no se mojen ni los libros, los libreros ni los visitantes”. “Esperamos que siga aumentando la presencia de público”, apuntó citando el ejemplo de una asociación de escritores de Madrid que participa por tercer año consecutivo, que viaja a diario y aún así “les sale rentable”, antes de advertir a los medios que no entrará en “descalificaciones” hacia nadie. “Eso lo dejo para otros”, remachó.

De la Riva recordó que, en sus inicios, la Feria del Libro de Valladolid contó con un respaldo económico de la Caja de Ahorros de Salamanca y Soria que “desapareció” años atrás, y lamentó asimismo que también se haya evaporado el “apoyo de la Junta de Castilla y León”, circunstancias que han obligado al Consistorio a “defender” el certamen con el presupuesto municipal.

El alcalde defendió que “una feria no es sólo un sitio para vender libros”, e hizo hincapié en su labor para “promocionar la lectura y el libro”. En ese sentido, sacó pecho para asegurar que “Valladolid posiblemente sea la única ciudad de España y no sé si del mundo en la que uno de cada tres habitantes es socio de una biblioteca municipal”. Citando cifras que “se actualizan periódicamente, eliminando de ellas a quien en un tiempo determinado no ha movido ningún libro”, De la Riva apuntó que actualmente “son más de 100.000 los socios que tienen las bibliotecas municipales de Valladolid, en activo”.