Libera se persona como acusación contra el dueño de 'Cooper'

D.V.
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Los animalistas reclaman el endurecimiento de las penas por maltrato animal y han aprovechado para reclamar a la Junta, "una vez más", la elaboración de un nuevo marco normativo de protección animal en Castilla y León

La Asociación Animalista Libera se ha personado como acusación popular en el procedimiento judicial contra el presunto responsable de la muerte de 'Cooper', un perro que fue hallado muerto con signos de violencia en una vivienda de Santovenia de Pisuerga (Valladolid). Abogados de la Coordinadora de Profesionales por la Prevención de Abusos (CoPPA) especializados en este tipo de casos trabajan para tratar de conseguir una condena ejemplar por la muerte del can, ha señalado la Asociciación en un comunicado recogido por Europa Press. 

  Libera ha señalado que la defensa de la protección de los animales que promueve "no puede eludir el vínculo existente entre el maltrato animal y violencia interpersonal, según numerosos estudios realizados y promocionados por los profesionales de CoPPA quienes buscan elevar la comprensión de la relación compleja entre la violencia doméstica y el maltrato hacia animales". 

  Los animalistas reclaman el endurecimiento de las penas por maltrato animal y han aprovechado para reclamar a la Junta, "una vez más", la elaboración de un nuevo marco normativo de protección animal en Castilla y León, ya que la Ley actual no da respuesta a los formatos de ayuda que desarrollan voluntarios y entidades sin ánimo de lucro como las "casas de acogida". 

  A juicio de la asociación, una nueva norma, actualizada, podría generar un "importante efecto disuasorio" en potenciales casos de abandono y de maltrato, como el de 'Cooper', el perro que no encontró una verdadera oportunidad de vida tras haber sufrido antes un abandono y después un macabro final. 

  'Cooper' fue adoptado, a través de Defensa Animal Valladolid (Defaniva) --que también ha anunciado que prepara su personación--, por una familia de Santovenia de Pisuerga (Valladolid) el pasado mes de marzo y encontrado muerto con signos de violencia el 20 e agosto en la cocina del domicilio de los adoptantes, una familia compuesta por una pareja y una niña de seis años, que habían mantenido el cadáver encerrado y tapado bajo mantas durante varios meses. Por ello, la Guardia Civil ha investigado a un varón de 41 años que vive en el domicilio.