El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) dio ayer la bienvenida, en principio, a la nueva iniciativa de la Unión Europea por la que triplicará sus fondos en las misiones de rescate marítimo, pero apuntó que su eficacia solo quedará probada si demuestra que es capaz de salvar vidas y proporciona a los inmigrantes un mejor trato legal que el exhibido hasta ahora.
«La prueba definitiva consistirá en que apreciemos una reducción de la pérdida de vidas, que se garantice a estas personas un acceso eficaz a la protección en Europa sin necesidad de cruzar el Mediterráneo, y un Sistema de Asilo Común Europeo efectivo, que de verdad responda a su compromiso de solidaridad», hizo saber la agencia de la ONU.
«Acnur cree que son un importante primer paso hacia una acción comunitaria colectiva, que es el único enfoque que puede funcionar para un problema de naturaleza tan amplia y transnacional», sostuvo, además, el portavoz de Acnur, Adrian Edwards.
«Desde nuestra experiencia, sabemos que, sin canales alternativos reales y sustanciales para que la gente logre seguridad, es improbable que sea eficaz el muy necesario incremento en los esfuerzos internacionales para combatir a los traficantes», afirmó.
Por otro lado, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) aseveró que «aplaude las conclusiones de la UE de que salvar vidas debe ser una prioridad». «Ha habido una reconsideración colectiva y le damos la bienvenida, en gran manera», manifestó el portavoz de la entidad, Leonard Doyle.
El acuerdo alcanzado el pasado jueves por los líderes europeos supondrá una aportación con cargo al presupuesto de la UE de nueve millones de euros al mes, lo que supone una cifra equivalente al coste de la operación exclusivamente italiana Mare Nostrum, reemplazada por la europea Tritón.
Los Veintiocho decidieron, asimismo, encargar a la Alta Representante de Política Exterior comunitaria, Federica Mogherini, que explore las opciones de una misión civil con componente militar cuyo objetivo sea «detener y destruir los barcos» que emplean las mafias y evitar que vuelvan a ser utilizados.
Además, avanzarán en un proyecto piloto para el reasentamiento de inmigrantes con derecho a protección, si bien retiraron de su declaración final la cifra de 5.000 personas, que es el techo que pretendían atender en principio.
‘HOJA DE RUTA’. Mientras, la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex) trabaja con las autoridades italianas para «rediseñar» el área de actuación de sus operaciones de vigilancia en el Mediterráneo, después de que la UE acordara triplicar los fondos para estas misiones y varios Estados miembros ofrecieran buques, aeronaves y expertos.
Bruselas prevé también presentar en las próximas semanas la hoja de ruta sobre los tiempos y el contenido de los siguientes pasos a dar para reforzar su respuesta a la crisis migratoria, incluida la acogida de refugiados y una mejor cooperación con los países de origen.