El alcalde, Francisco Javier León de la Riva, aseguró ayer que se estudia limitar el número de pruebas populares con recorrido por el centro de la ciudad para reducir el coste que implican en horas extra para los agentes de Policía y la incidencia en el tráfico. El regidor apuntó que el Ayuntamiento va a tener que «limitar las carreras populares» que transitan por el centro de Valladolid, ya que en los últimos años ha crecido de forma notable el número de competiciones de este tipo, pues explicó que ya se han formulado numerosas quejas de vecinos e incluso alguna «reclamación patrimonial» de una persona que perdió el tren al llegar tarde a la estación como consecuencia de los cortes de tráfico derivados de una prueba deportiva.
«Vamos a dejarlo en las más clásicas o introducir una especie de peaje en la sombra para que el coste que tiene una prueba de éstas repercuta algo en los organizadores», añadió León de la Riva, que detalló que una marcha como la del pasado domingo, con 16.000 personas por el centro de la ciudad, tuvo un coste de 3.200 euros sólo en horas extra de los agentes policiales destinados a la seguridad de los participantes en el tráfico.
Sin embargo, el alcalde no mencionó la manifestación de l pasado sábado en favor de Pingüinos, donde él mismo participó con más de 4.000 moteros por las calles de la ciudad. Además, estas declaraciones las realizó precisamente en la rueda de prensa de una marcha solidaria.
policía a caballo. En este sentido, el Grupo Municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento aseguró que los 3.200 euros que han costado las horas extras generadas por los agentes de Policía para asistir a los participantes en la Marcha contra el Cáncer están «mucho mejor gastados» que los «28.800 euros anuales de la manutención de los caballos» de la Policía Municipal. La concejal de IU María Sánchez calificó de «desatino» esta afirmación de León de la Riva y lamentó que esa «actitud cicatera» contrasta con la «generosidad con que se emplea en otras actividades».
Por otra pare, IU rechazó la actitud «camorrista» del alcalde por instar, a su juicio, al «enfrentamiento» entre asociaciones ciudadanas para «eludir su responsabilidad» sobre la suspensión de la concentración motera Pingüinos.